Alquileres, ¿Negocio o engaño?
Ante la falta de espacios propios, el estado destina millones de dólares en alquiler de oficinas óptimas para entidades públicas. Sin embargo, la realidad es que muchos sitios en los que opera el gobierno están en condiciones precarias. El exceso de funcionarios, el poco mantenimiento y espacio hacen de estas oficinas verdaderas trampas de inseguridad.