US Open Cup: Carrasquilla y el Dynamo se coronan ante un Inter Miami sin Messi
Final
Con la ausencia por lesión de Lionel Messi, el Inter Miami perdió este miércoles 2-1 ante el Houston Dynamo en la final de la US Open Cup, quedándose sin su segundo título desde la llegada del astro argentino.
Messi, lastrado por problemas físicos desde hace varias semanas, no se vistió de corto, al igual que el español Jordi Alba, para esta final celebrada ante su público del torneo de fútbol más antiguo de Estados Unidos.
El estadounidense Griffin Dorsey en el minuto 24 y el francés Amine Bassi en el 33, con un penalti forzado por el colombiano Nelson Quiñones, anotaron los goles del Dynamo mientras el venezolano Josef Martínez descontó en el 90+2.
Los pupilos de Gerardo Martino no pudieron reponerse de la ausencia de Messi, la figura que ha catapultado a esta franquicia desde el último lugar de la MLS hasta el triunfo en la Leagues Cup en agosto y a esta final de la US Open Cup, torneo de eliminatorias equivalente a la Copa del Rey española o la FA Cup inglesa que se disputa desde 1914.
El crack de Rosario, que ya fue baja en la jornada del domingo de la liga norteamericana (MLS), fue duda hasta el último momento pero acabó viendo el partido con su familia en un palco a nivel de césped del estadio DRV PNK de Fort Lauderdale (afueras de Miami).
El estado físico de Messi, de 36 años, ha estado rodeado de misterio en las últimas dos semanas y el 'Tata' ha atribuido sus problemas a la fatiga muscular y a molestias por la cicatriz de una antigua lesión en la pierna derecha.
La final atrajo al estadio del Inter a personalidades como Gianni Infantino, presidente de la FIFA, y Zinedine Zidane, excompañero en el Real Madrid de David Beckham, uno de los propietarios del Inter.
El equipo de Florida, imbatido en los 12 partidos que ha jugado Messi, espera ahora recuperar a su capitán para el intento de clasificar a los playoffs de la MLS, para lo que necesita una espectacular remontada en sus últimos cinco partidos, el primero de ellos este mismo sábado.
Para Houston, liderado por el mediocampista mexicano Héctor Herrera y el panameño Adalberto Carrasquilla, es el segundo título de la US Open Cup después del de 2018 y una gran alegría para una franquicia que lleva sin clasificar a playoffs desde 2017.
Carrasquilla jugó hasta el primer minuto de reposición, luego de transcurrido el tiempo reglamentario, tras lastimarse una de sus piernas. Sin embargo salió de la cancha caminando sin necesitar la ayuda de los miembros del cuerpo médico del Dynamo.
- Sin milagro final -
Con la moral crecida por las sensibles bajas del rival, el Dynamo arrancó el choque a la ofensiva explotando la velocidad por la banda izquierda del veloz Quiñones.
Cada internada del exatacante del Once Caldas era una pesadilla para el veterano lateral DeAndre Yedlin, mientras en el centro del campo el mexicano Héctor Herrera y el panameño Adalberto Carrasquilla imponían su ley frente a Sergio Busquets.
El veterano mediocampista, el único del trío de exbarcelonistas del Inter sobre el césped, tenía por escuderos a dos jóvenes de 18 y 20 años, el argentino-estadounidense Benjamin Cremaschi y el paraguayo Diego Gómez.
El 'Tata' Martino tuvo que colocar a otra promesa, el argentino Facundo Farías, en el lugar de Messi y el exjugador de Colón facilitó la primera diana de Houston con un defectuoso pase en el medio campo.
La pérdida derivó en una gran acción colectiva de Houston, que movió la pelota desde el pico izquierdo al derecho del área de Miami, donde irrumpió Griffin Dorsey para lanzar un trallazo a la red.
El Inter no supo reaccionar al gol y siguió permitiendo contragolpes del Dynamo hasta que el árbitro señaló penal cuando Quiñones fue derribado por Yedlin cuando se plantaba solo ante el arquero Drake Callender.
El francés Bassi convirtió la pena máxima que la estrella de la NBA James Harden, accionista del Dynamo, gritó a todo pulmón desde el palco vestido con la camiseta de su franquicia.
El inofensivo ataque del Inter necesitó de 42 minutos para hacer su primer disparo del partido, que Cremaschi envió alto.
El delantero venezolano Martínez, que entró al descanso, tuvo una gran ocasión para el Inter en el minuto 54 con un cabezazo en el área que rozó el palo.
El colombiano Quiñones volvió a silenciar a los 21.000 aficionados del estadio al anotar en un fulminante contragolpe de Houston, pero el árbitro anuló el gol por fuera de juego tras revisar el VAR.
Martínez anotó el 2-1 con un remate dentro del área con dos minutos del tiempo agregado, haciendo soñar al público con otra de las milagrosas remontadas de la 'era Messi', pero el ecuatoriano Leonardo Campana y Farías no acertaron en las últimas llegadas con peligro.