Lo bueno, lo malo y lo feo de la primera jornada del Clausura 2016 de la LPF
Se esperaba mucho más del Plaza Amador, equipo que cuenta con una plantilla más que interesante para acometer el asalto definitivo por el título.
San Francisco de La Chorrera, de la mano de su entrenador, el experimentado Gary Stempel, sin dudas, fue lo mejor del inicio del Torneo Clausura 2016 de la Liga Panameña de Fútbol (LPF).
LO BUENO
En colectividad, en formas, en detalles y, sobre todo, en demostración de calidad dentro del rectángulo verde, el cuadro chorrerano obtuvo una puntuación de 10.
Su despliegue ante el Árabe Unido, el pasado viernes, en el Estadio Agustín “Muquita” Sánchez, fue bestial: buena sincronización en todas las líneas, partidazo de Michael Amir Murillo, completísimo el trabajo de Francisco Palacios y muy destacable la actuación de Richard Rodríguez, quien, de paso, habilitó a Ervin Zorrilla (que definió a lo “crack”) en el 2-0.
Árabe no encontró remedio para desarticular el buen fútbol propuesto por el San Francisco. Por lo visto, los de Stempel parten como candidatos para hacerse con el Clausura 2016. Posible es. Claro, no será fácil.
LO MALO
Se esperaba mucho más del Plaza Amador, equipo que cuenta con una plantilla más que interesante para acometer el asalto definitivo por el título.
El cuadro leónico, en su debut el sábado pasado ante el Atlético Nacional, se quedó corto de ideas y no remató la faena. Lo peor, en los últimos minutos, en los que dominó el esférico y arremetió con mucha presión, no supo cómo llevarse el gato al agua. Claro está que quedó en deuda ante su afición.
Jair Palacios deberá seguir trabajando con todo para aprovechar la calidad humana y futbolística con la que cuenta en estos momentos. El tiempo, su mayor rival.
LO FEO
Según una fuente de alta confiabilidad, el encargado de logística y seguridad de la LPF estaría reemplazando a los cuidadores de puertas [los que acumulan muchos años trabajando para la Liga] para colocar a algunos colombianos, incluyendo a su mujer e hijos en las entradas. Reemplazando la mano de obra panameña para meter a extranjeros.