Érick Díaz, jugador de estirpe en la Sub-17 de Panamá

Érick Díaz / FEPAFUT

El fútbol del más alto nivel corre por sus venas.

Y solo hay que ver su pegada de pierna izquierda para entender.

Su nombre es Érick Díaz, hijo del ex seleccionado Neftalí Díaz, recordado delantero del fútbol de Panamá.

Pero a diferencia de su padre, el apodado 'Poeta de la Zurda', Érick, primero defiende y luego sale a atacar.

Díaz, de 17 años, es el único jugador de la convocatoria de la Selección Masculina Sub-17 de Panamá que sabe lo que es disputar un partido con la Selección Mayor.

El defensor del Tauro FC fue llamado por el entrenador Thomas Christiansen y debutó en un partido internacional al entrar en el segundo tiempo del amistoso en Cochabamba ante Bolivia.

Autor de un tanto de tiro libre en el pasado Premundial Sub-17 de CONCACAF, en Guatemala, aquí le dejamos una serie de preguntas con el estudiante del Colegio Richard Neumann.

¿A qué edad empezaste a jugar fútbol?

Empecé a los 4-5 años, con mi papá que me formó desde pequeño.

Tu primer equipo.

Neftagol en el área de San Antonio, Tocumen.

¿La persona más influyente en tu vida?

Mi madre y mi abuela.

¿Jugador favorito internacional?

Leo Messi.

¿Jugador favorito nacional?

Andrés Andrade, siempre lo admiro.

El mejor consejo que te han dado.

El que me dio mi papá, que pudo haber llegado más lejos y yo quiero romper esa barrera, de lo que mi padre no pudo ser, quiero superar eso, y ese consejo siempre me lo da.

¿Qué le dirías a un niño que sueña con estar en un Mundial?

Que tenga disciplina y respeto, que siga trabajando fuerte con humildad y se mantenga.

Te has puesto a pensar en el momento cuando suene el himno en el Mundial.

Claro que sí, un orgullo muy grande para mi familia, también para mí, mi primer Mundial y sería algo muy grande para mí y todos mis compañeros. Nos hemos esforzado mucho, hemos trabajado bastante para estar aquí y lo haremos de la mejor manera para poder enorgullecer a todos.

Tu mensaje a la afición.

Que nos apoyen, y que nos den las mejores vibras posibles para poder hacer las cosas de la mejor manera para poder afrontar lo que viene.