Djokovic-Federer y Nadal-Ferrer en semis del Abierto de Francia
Roger Federer frenó la racha de 43 triunfos de Novak Djokovic cuando lo derrotó el año pasado en las semifinales del Abierto de Francia. Esa también fue la última vez que Djokovic perdió en un torneo de Grand Slam. Cuando ambos se enfrenten en la misma etapa el viernes en Roland Garros, Federer nuevamente es el gran obstáculo del serbio que busca ser el primer hombre en 43 años que conquista cuatro títulos de Grand Slam consecutivos. "Trataré de entrar a la cancha con la mentalidad de que puedo ganar", comentó el número uno del ranking mundial, quien ganó Wimbledon en julio, el Abierto de Estados Unidos en septiembre y el Abierto de Australia en enero. "En realidad no hay un favorito". La segunda semifinal del viernes tiene como protagonista a otro tenista que busca hacer historia: Rafael Nadal, quien enfrenta a su compatriota español David Ferrer e intenta ganar su séptimo trofeo del Abierto de Francia, con lo que rompería el récord de seis que comparte con el legendario Bjorn Borg. Nadal tiene marca de 50-1 en Roland Garros, donde su único revés fue en la cuarta de ronda de 2009 ante Robin Soderling. "¿Cuán desalentador es jugar contra Nadal en esta superficie (arcilla)? ... En mi época, cuando jugaba Borg, él era como una pared humana. Era más rápido que todos, estaba en mejores condiciones que todos, y no podías ganarle un punto", comentó John McEnroe, un ganador de siete títulos de Grand Slam que tuvo una gran rivalidad con Borg. "Vi a jugadores agotarse en el primer set... y pasa lo mismo cuando enfrentas a Nadal". El español, segundo del ranking mundial, ha ganado los 15 sets que ha disputado este año en París, 60 de los 61 games en su saque, y ha salvado 16 de los 17 puntos de quiebre en contra que encaró hasta ahora. Djokovic y Federer, por el contrario, necesitaron remontadas épicas para llegar hasta las semifinales, luego que ambos perdían por dos sets en sus respectivos partidos contra Jo-Wilfried Tsonga y Juan Martín del Potro. Estos dos gigantes del tenis protagonizaron un par de duelos memorables el año pasado. En el Abierto de Francia, el serbio estaba invicto y parecía invencible hasta que Federer lo derrotó en cuatro sets cuando caía la noche sobre París. De haber sido necesario un quinto parcial, se habría disputado al día siguiente. Tres meses después, en las semifinales del Abierto de Estados Unidos, Djokovic se recuperó de una desventaja de dos sets y dos puntos de partidos, el primero con una devolución de derecha en la que apostó por el todo o nada y la pelota apenas rasguñó la línea. "Nunca jugué así", admitió Federer ese día. "Yo creo en que el trabajo duro rinde frutos, porque al principio (de mi carrera) quizás no siempre di el máximo. Así que me es muy difícil entender cómo puedes realizar un tiro así en punto de partido. Pero quizás él lleva 20 años haciéndolo así, y para él fue muy normal. Tienen que preguntarle a él". Djokovic luego salvó otro punto de partido, y con el público de repente de su lado, ganó los cuatro últimos games. Después, el serbio reconoció que pensó que ya el partido estaba perdido y dijo que no podía explicar ese primer match point. En los cuartos de final de este Abierto de Francia, Djokovic salvó cuatro puntos de partido ante Tsonga. Si la primera raqueta del mundo finalmente gana en Roland Garros —para unirse a una lista que incluye a Don Budge en 1938 y Rod Laver en 1962 y 1969 como los únicos jugadores que han conquistado cuatro Grand Slams en sucesión— sin duda esos seis puntos de partido serán recordados por siempre. "Cuando haces tiros así, y cuando ganas partidos así, de cierta manera pasas a la historia. Te colocan en un nivel en el que de repente puedes ser mencionado como uno de los mejores tenistas en la historia", señaló McEnroe. "Realmente respeto la habilidad de un tipo como Novak, que encuentra la forma de hacer cosas así". Budge y Laver ganaron sus torneos de Grand Slam en el mismo año natural, así que hay quienes creen que lo que Djokovic podría lograr no debe ser considerado como un verdadero Grand Slam porque sería en dos temporadas. De todas formas, sería bastante impresionante. "Yo estaría más que feliz con cuatro en fila. Técnicamente no es "El Grand Slam""", indicó McEnroe. "Pero yo haría algún tipo de estatua o algo así si ganara cuatro en fila, y la andaría exhibiendo en mi casa por el resto de mi vida".