Predomina el dopaje en el deporte australiano
Una investigación del gobierno australiano descubrió un uso ampliamente generalizado de fármacos prohibidos por parte de atetas de élite y vínculos con la delincuencia organizada, sacudiendo a una nación que se enorgullece de sus logros deportivos y su noción colectiva del juego limpio. "Los descubrimientos son impactantes y van a disgustar a los aficionados a los deportes", dijo el jueves el ministro de Justicia Jason Clare en una conferencia de prensa en Canberra sobre la investigación de un año de duración. Se sospecha que "múltiples atletas de varios clubes en los principales deportes australianos están utilizando actualmente o han usado" sustancias para mejorar el rendimiento físico-atlético, agregó. Las dos competencias deportivas más populares del país, la Liga de Fútbol Australiano —con reglas australianas— y la Liga Nacional de Rugby, ya han admitido que están colaborando con la comisión nacional contra la delincuencia y que ya comenzaron sus propias investigaciones. Otros deportes muy publicitados están haciendo lo mismo. Una fuerza policial estatal tiene sospechas sobre un juego de fútbol reciente que atrajo apuestas fuertes y al parecer una atención inusual de parte de organizaciones asiáticas de apuestas. La Comisión Australiana Contra la Delincuencia (ACC por sus iniciales en inglés) dio a conocer el jueves los descubrimientos de su investigación, denominada Project Aperio. Dijo que existía evidencia de arreglo de resultados, uso generalizado de sustancias prohibidas —incluidos péptidos, hormonas y fármacos ilícitos_, así como de la infiltración de grupos de la delincuencia organizada en la distribución de fármacos para mejorar el desempeño físico y la imagen. El uso de fármacos prohibidos por parte de atletas profesionales fue mayor en los deportes principales de lo que indicaban los actuales programas de examen antidopaje, afirmó el reporte de la comisión. Agregó que algunos entrenadores, científicos deportivos y personal de apoyo habían "orquestado y/o excusado el uso de sustancias prohibidas" que en ocasiones ni siquiera estaban autorizadas para el uso en seres humanos. La ACC dijo que no podía revelar los detalles sobre individuos o los deportes involucrados, pero que ha dado informes confidenciales a algunos organismos deportivos y entregado sus descubrimientos sobre ciertas personas y clubes a la Policía Federal australiana y fuerzas de Policía estatal.