París 2024: Macron hace un llamado con los Juegos Olímpicos en el horizonte

El presidente francés, Emmanuel Macron, llamó este martes a la "movilización nacional" a 500 días de los Juegos Olímpicos de París de 2024, cuando los retos financieros, de seguridad y de transporte se acumulan de cara a la cita mundial.

"Estos 500 días representan el inicio de una cuenta atrás que llega tras años y años de esfuerzos (...) También serán los de la movilización nacional", dijo Macron, en un video difundido en las redes sociales.

El presidente organizó el martes un almuerzo en el Elíseo, sede de la presidencia, con empresas colaboradoras que destinarán 1.200 millones de euros (1.286 millones de dólares) a la organización de los Juegos, alrededor de una cuarta parte del presupuesto.

Macron también se reunió con Tony Estanguet, el jefe del comité de organización, y Thomas Jolly, el director artístico de la inédita ceremonia de apertura a lo largo del río Sena, que representa un reto en materia de seguridad.

"Intentaremos recibir al planeta en las mejores condiciones posibles de seguridad, de organización, de responsabilidad social y ecológica", dijo Macron. "¡También intentaremos ganar el mayor número de medallas!".

Esta revisión de tropas, entre ellas medio millar de funcionarios implicados en la organización, llega unos diez meses después que el caos de la final de Liga de Campeones en mayo de 2022 sembrara dudas sobre la capacidad de Francia para albergar la cita olímpica.

La presidencia francesa indicó que Macron quiere asegurarse que "todos estén en el trabajo" y que "se conozcan y anticipen los posibles escollos".

Por primera vez en la historia olímpica, la ceremonia de apertura no tendrá lugar en un estadio, sino en el exterior.

El 26 de julio de 2024 a las 20h24, más de un centenar de embarcaciones recorrerán el río Sena desde el Puente de Austerlitz hasta la torre Eiffel con las delegaciones de deportistas a bordo. 

Unos 600.000 espectadores contemplarán en vivo la ceremonia a lo largo de sus 6 kilómetros. 

"Hemos aprendido todas las lecciones de los acontecimientos del Stade de France" durante la final de Champions, aseguró el martes la ministra de Deportes, Amélie Oudéa-Castéra.

"Tenemos ganas de mostrar lo mejor de Francia", dijo a la AFP Estanguet, subrayando que todavía tienen trabajo por delante.

- "Formidable herencia" -

Otro de los temores es un caos en el transporte. ¿Los aeropuertos podrán gestionar los millones de visitantes esperados? ¿Las adaptaciones para las personas con movilidad reducida serán suficientes?

¿Y habrá huelgas, algo que muchos extranjeros consideran una especialidad francesa? La actual contestación contra la impopular reforma de las pensiones de Macron refuerza esta incertidumbre.

Sobre las infraestructuras deportivas y de alojamiento, Oudéa-Castéra indicó que estarán listas entre "diciembre de 2023 y la primavera" boreal.

El presupuesto del comité de organización también está en el punto de mira, máxime cuando las partidas iniciales suelen dispararse en este tipo de eventos y la inflación actual no ayuda.

Este aumentó un 10%, hasta los 4.400 millones de euros (4.720 millones de dólares) a finales de 2022, por un costo total de 8.800 millones de euros (9.440 millones de dólares) si se incluye el presupuesto de Solideo, la empresa encargada de las obras olímpicas.

"Los costos están absolutamente contenidos", aseguró la ministra.

Una vez terminados, los Juegos dejarán como "formidable herencia", en palabras de Macron, "5.000 nuevos terrenos deportivos", "infraestructuras de transportes" y... sobre todo la posibilidad de bañarse en el Sena, tras un siglo de prohibición.