Osaka y Azarenka se retiran de los torneos previos al Abierto de Australia
Prefieren bajar un poco el ritmo y estar al 100 por ciento
La tenista Naomi Osaka, número 3 de la clasificación mundial, y la ganadora de dos grandes Victoria Azarenka se retiraron de los torneos previos al Abierto de Australia, sumándose a Serena Williams y a Simona Halep, preocupadas por las lesiones.
La japonesa Osaka, campeona del Abierto de Estados Unidos y ganadora del torneo australiano en 2019, desistió de disputar el partido de semifinales contra Elise Mertens del Torneo Gippsland Trophy.
"Perdón al Tenis Australia y a los aficionados por tener que retirarme hoy", dijo en la cuenta de Twitter de la WTA.
"Tengo una molesta lesión y ante el AO (Abierto de Australia) en el horizonte tengo que tener cuidado. Estoy deseando jugar la semana próxima".
Osaka eliminó el viernes por la noche a Irina-Camelia Begu 7-5, 6-1 en 76 minutos.
Antes, se había retirado también la estadounidense Serena Williams, que prefirió no jugar en las semifinales contra la número uno mundial Ashleigh Barty por molestias en un hombro.
Williams, de 39 años, había eliminado a su compatriota Danielle Collins 6-2, 4-6, 10-6 en el Yarra Valley Classic, pero se retiró después, pese a que no había mostrado molestias durante el partido.
Dos veces ganadora del Abierto de Australia, Azarenka también fue baja el sábado, prefiriendo no disputar el partido de cuartos de final contra Anett Kontaveit en el Torneo Grampians Trophy por un dolor en la espalda.
Mertens se enfrentará a Ekaterina Alexandrova o Kaia Kanepi en la final del Torneo Gippsland, mientras Barty se enfrentará a la vencedora del partido entre Garbiñe Muguruza y Marketa Vondrousova en el Yarra Valley Classic.
Mientras la retirada de Williams y Osaka parece más bien un gesto para preservarse ante el Abierto que se inicia el lunes, hay mayor preocupación sobre la forma física de Halep.
La número 2 de la clasificación mundial perdió ante Alexandrova 6-2, 6-1 en el partido de cuartos de final del Torneo Gippsland Trophy, en el que sufrió un dolor en la espalda por el que pidió asistencia médica después del primer set.
La rumana ya sufrió una hernia discal a finales de 2018, que le obligó a estar de baja durante seis semanas.
