Los Juegos Olímpicos y su lado “B”
JUEGOS OLÍMPICOS
No todo lo que sale en las transmisiones de los Juegos Olímpicos que se desarrollan en Tokio, Japón, es lo único que acontece, también hay hechos extraños y polémicos que ocurren paralelamente y que poco se conoce.
Aquí nombraremos algunos hechos que, hasta el momento, han dado de qué hablar en los Juegos Olímpicos, llamados también el “Lado B”.
Proyecto Medalla Tokio 2020.
El Comité Organizador de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Tokio, llevó a cabo el "Proyecto Medalla Tokio 2020" que consiste en recolectar dispositivos electrónicos, como teléfonos celulares usados en todo Japón para producir las medallas Olímpicas y Paralímpicas.
En los dos años transcurridos entre abril de 2017 y marzo de 2019, el 100 por cien de los metales necesarios para fabricar las aproximadamente 5.000 medallas de oro, plata y bronce se extrajeron de pequeños dispositivos electrónicos que fueron aportados por ciudadanos de todo el país.
Aproximadamente 78.985 toneladas recolectadas por las autoridades municipales de todo Japón (pequeños dispositivos electrónicos usados, incluidos teléfonos móviles) recolectados en una de las más populares tiendas en todo Japón y alrededor de 6.21 millones de teléfonos móviles usados.
Abucheo de himno chino durante los Juegos.
La policía hongkonesa anunció este viernes la detención de un hombre luego de que espectadores abuchearan el himno chino y lanzaran consignas a favor de Hong Kong, mientras veían a principios de semana los Juegos Olímpicos de Tokio en una pantalla gigante en un centro comercial.
"Cuando se tocó el himno nacional en el centro comercial, hubo gente que enarboló abierta y deliberadamente la bandera colonial de Hong Kong e incluso animó a otras personas a abuchear, gritar consignas e insultar el himno", dijo una vocera de la policía a la prensa.
Un hombre de 40 años fue detenido, según la policía, quien señaló que estaba investigando para determinar si los espectadores habían violado la ley durante la retransmisión en el centro comercial.
Estas acciones fueron una "incitación al odio y una politización del deporte", añadió la portavoz.
El británico que entrenó en una piscina de lona en el patio de su casa para luego ganar el oro en Tokio.
La historia del británico Matthew Richards, es una de esas que inspiran de verdad y es que durante el cierre de todas las instalaciones deportivas en el inicio de la pandemia por la Covid-19, Richards quien practica la natación, tuvo la necesidad de comprar una piscina de lona y así entrenar en el patio de su casa.
La medida de la piscina es de 3 metros de ancho, 5 metros de largo y 1 de profundidad, el jardín se convirtió en su centro de alto rendimiento; "Le ajustamos unas cuerdas elásticas a la pared del garaje y él pasó allí, nadando hora tras hora, en su traje de neopreno, para no perder su contacto con el agua", dijo el padre Simon Richards.
Matthew Richards ganó el oro en la prueba de estilo libre por equipos en los 200 metros, junto a sus compañeros Duncan Scott, James Guy y el dos veces campeón olímpico Tome Dean.
Ítalo Ferreira, el primer campeón olímpico de surf.
El camino hacia los Juegos Olímpicos para el brasileño, Ítalo Ferreira, ha estado marcado de muchos tropiezos donde el mismo Ítalo, ha sabido superar para conseguir sus metas.
Su historia podríamos iniciarla cuando Ítalo tenía 12 años y formaba parte de una familia humilde en Natal, Brasil, Luiz Campos un cazatalentos del surf lo vio en el mar: “Vi a un niño haciendo un 360 en el aire. Y después otro. La competición empezaba dos días más tarde y pregunté a la gente quién era ese chico. 'Se llama Ítalo'”, comentó Campos en una entrevista a la World Surf League. También se conoce que Ítalo aprendió a surfear con tablas que le prestaban.
Hoy día a sus 27 años, para poder clasificar a los Juegos Olímpicos, pasó por toda una ola turbia, en septiembre del 2019, Ítalo Ferreira entrenaba en los Estados Unidos y le robaron de su automóvil, el pasaporte y la visa para poder entrar a Japón.
Por suerte pudo resolver el problema del pasaporte y la visa, pero un tifón retrasó el vuelo que lo llevaría a Japón, provocando así un monumental retraso para poder competir en su manga clasificatoria, el tiempo era poco y del aeropuerto se fue directamente a la competencia, llegando nueve minutos antes de que arrancara su manga, sin tabla, sin la vestimenta de surf, se metió al agua en jeans y con una tabla prestada, Ganó la manga, pasó de ronda y ya con sus pertenencias a mano, compitió en la segunda manga y acabó proclamándose campeón del torneo y logrando así el boleto a los Juegos en los que iba a debutar su deporte.
El boxeador marroquí que intentó morder a su rival.
El cuadrilátero olímpico también nos ha dejado momentos curiosos y extraños en estos Juegos de Tokio y es que el boxeador de pesos pesados marroquí, Youness Baalla, trató de morderle la oreja a su rival, David Nyika de Nueva Zelanda.
Al estilo Mike Tyson, lo verídico es que el neozelandés no lo podía creer, que en medio del combate su rival hubiese perdido la razón e intentara morderle la oreja, el resultado fue la descalificación de Baalla.
Lo que Tokio no quiere que el mundo vea en estos Juegos Olímpicos.
Los Juegos Olímpicos que se disputan en Tokio, Japón, están presentando al mundo un gran espectáculo en organización e imagen, pero en la oscuridad hay otra realidad que esconden, esto es característico en todo evento deportivo mundial que se desarrolle en cualquier nación.
La BBC de Londres realizó un reportaje especial sobre este tema y es que las personas sin hogar, han sido removidas de la capital japonesa, específicamente del metro de Tokio, de los alrededores de los coliseos olímpicos y en de los parques.
“Ayudamos a muchos sin techo a mover sus objetos personales, sino las autoridades las habrían tirado, estaban muy perturbados”, declaró Tetsuo Ogawa, uno de los ciudadanos japoneses sin techo.
La BBC contactó a las autoridades japonesas y al Comité Olímpico Internacional pero no obtuvo respuesta, el gobierno ha dicho anteriormente que ha tratado de trasladar a albergues a las personas sin techo, negando así que los fuerzan a desalojarlos del centro por los Juegos Olímpicos.