Ravens terminan dura serie contra los Browns
La NFL no le hizo ningún favor a los Ravens de Baltimore al ponerlos a jugar cuatro veces en un lapso de 18 días, incluyendo tres partidos nocturnos. En lo que podría ser percibido como un gesto conciliador, el encargado del calendario le permitió a los Ravens concluir ese período difícil la noche del jueves en su estadio contra los Browns de Cleveland, que aún no cuentan con victorias. Baltimore (2-1) ha ganado 12 partidos consecutivos en casa, la racha más larga en la NFL, y su racha de nueve triunfos contra rivales de la División Norte de la AFC es también la mejor en activo entre equipos dentro de su propia división. Si se suma el hecho de que los Ravens han ganado ocho en fila sobre los Browns (0-3) por un marcador total de 203-91, parece que este partido está muy desequilibrado. Lo que lo equilibra son los cortos plazos para Baltimore. Los Ravens salieron del campo cerca de la medianoche el domingo tras su emocionante triunfo por 31-30 sobre los Patriots de Nueva Inglaterra, y regresarán al césped para la patada inicial contra los Browns apenas 92 horas y media después. "Hemos jugado un jueves después de un domingo, pero no hemos jugado un jueves después de una noche de domingo", dijo el entrenador John Harbaugh. "Estamos ajustando el horario un poco. Dos cosas son importantes: la preparación y la recuperación. Uno no puede realmente poner una detrás de la otra; la recuperación va a ser tan importante como la preparación". En lugar de tener una semana para permitir que sus moretones sanen, los Ravens tuvieron tres días. No hubo golpes en la práctica, y Harbaugh instruyó a los jugadores a tomarlo con calma por la noche. "Nuestros entrenadores tienen que entender que no pueden presionar a este equipo", dijo el safety Bernard Pollard. "No podemos entrenar como normalmente podemos porque acabamos de salir de una batalla hace un par de noches. Nuestros entrenadores están haciendo un buen trabajo, nuestros entrenadores de posición están haciendo un gran trabajo en las reuniones. Vamos al salón de pesas, nos metemos en la cama, descansamos un poco y volvemos aquí listos para comenzar de nuevo". Los Ravens afrontaron la parte de la ecuación referente a la preparación al observar a los Browns antes de que Baltimore enfrentara a Nueva Inglaterra. Cleveland tiene sus propios problemas, como acelerar una ofensiva centrada alrededor del novato quarterback Brandon Weeden y el running back Trent Richardson.