Otra final épica para Nadal, pero esta vez le tocó perder

Hace casi cuatro años, Rafael Nadal quedaba del lado ganador de otra final épica al vencer con parciales de 6-4, 6-4, 6-7 (5), 6-7 (8) y 9-7 al suizo Roger Federer en el partido decisivo de Wimbledon 2008. El jugador español dijo que coloca su derrota en cinco sets ante el serbio Novak Djokovic en la final del Abierto de Australia junto a ese enfrentamiento de Wimbledon como dos de los encuentros más memorables que ha jugado. Nadal se quedó corto contra Djokovic al caer por 5-7, 6-4, 6-2, 6-7 (5) y 7-5 en un partido de casi seis horas en el Melbourne Park que terminó la madrugada del lunes. El enfrentamiento del domingo evocó en él recuerdos de su final en Wimbledon contra Federer, ya que fue igualmente dramática y tensa, aunque no tan larga. Nadal acabó con Federer en 4:48 horas. "Para mí fue un poco más especial el 2008", dijo Nadal con una sonrisa en la conferencia de prensa posterior al enfrentamiento. "Pero comprendo realmente que fue un enfrentamiento realmente especial y probablemente un partido que estará en mi mente no porque haya perdido, no, sino por la forma en que jugamos". "Eso significa que hice muchas cosas bien para competir contra los mejores jugadores del mundo, ganándoles, perdiendo ante ellos, pero teniendo siempre enfrentamientos duros. Y la final de Wimbledon 2008 y éste fueron muy especiales", agregó. Que haya sido especial no significa que Nadal quiera pasar por una experiencia similar de nuevo. Cuando se le preguntó si miraría alguna vez el video del partido, respondió: "Demasiado largo, sólo lo más destacado".