Carlos Sainz: "El GP de España sin público es menos estresante, pero menos especial"
Reconoce Carlos Sainz que en cada Gran Premio de España le invaden los nervios como en ningún otro lugar. Siempre que pisa el circuito de Barcelona-Cataluña lo hace sintiéndose observado y con el férreo deseo de conseguir un buen resultado.
Su bagaje en 'casa', no habiendo pilotado aún un gran coche, es esperanzador a pocos meses de subirse a un Ferrari para empezar a escribir una nueva historia vestido de rojo. Con Toro Rosso, con Renault y con McLaren ha terminado siempre en la zona de puntos. Su debut en Montmeló se produjo en 2015, con la filial de Red Bull. Sorprendió con su quinto puesto en la sesión de clasificación y terminó noveno en carrera.
Con Toro Rosso firmó en 2016 su mejor resultado en el circuito de Barcelona-Cataluña, con su sexta posición. En 2017 fue séptimo, un lugar que repitió en 2018 ya como piloto de Renault. El año pasado, con McLaren, progresó desde la duodécima plaza de la parrilla hasta la octava posición final.
Después de cinco temporadas ganando puntos, este Gran Premio de España recibe a Carlos Sainz con extrañeza. "No tener a los aficionados hace mi vida menos estresante", contó este sábado en un encuentro con algunos medios de comunicación, entre ellos EFE, "pero también menos especial". "Echo de menos la presión de correr en casa, de sentir el calor de los aficionados sobre mí", reconoció.
Considera, no obstante, que la cercanía del público en esta carrera ha tenido "un impacto positivo" en su rendimiento. "Creo que ocurre como en el fútbol, es positivo que te animen", apuntó.
Este domingo no habrá ni un aficionado en las gradas. No habrá banderas con el número 55, el suyo. Tampoc le acompañarán los gritos cuando recorra curva a curva los recovecos del circuito.
Será esa la consecuencia más palpable de la crisis sanitaria que está golpeando al mundo y, especialmente, a España. "Sé que aquí, para mucha gente, está siendo especialmente doloroso", señaló el madrileño, quien este fin de semana está luciendo un casco que guarda un mensaje de recuerdo a las víctimas de la pandemia y de cariño para quienes sufren sus efectos.
"Me estoy planteando utilizarlo durante el resto del año. Creo que representa muy bien el año tan raro que estamos viviendo", desveló. El diseño guarda el mensaje "Por vosotros" en su parte trasera, en memoria de quienes ya no están. También rinde homenaje a los familiares de las víctimas, a los enfermos y a los sanitarios, un pilar básico en estos tiempos.
Por todos ellos, Carlos Sainz desea plasmar en la carrera del domingo las buenas sensaciones que dejó este sábado.
"Séptimo es una buena posición de partida", dijo. "Anoche tomamos la decisión de cambiar el motor después de los problemas de refrigeración de las últimas carreras y parece que el problema ha desaparecido. Es una gran noticia", destacó.
Desde ese lugar de la parrilla intentará atacar el top-5, "aunque será difícil teniendo delante a Mercedes, Racing Point y Red Bull", puntualizó.
"Estaremos contentos si terminamos con los dos coches más o menos donde estamos ahora (su compañero, Lando Norris, saldrá octavo). Para ello necesitaremos una ejecución perfecta", remarcó.