Expresidente del Barça invierte en el fútbol chino
Apuesta por Asia
Los chinos han gastado millones de euros en la adquisición de clubes históricos de Europa como el Milan AC, el Inter de Milán o el Aston Villa, pero cuando son los inversores europeos los que deciden adquirir un club de China, apuntan mucho más abajo.
Un grupo de empresarios españoles, entre los que se encuentra el expresidente del FC Barcelona Joan Laporta, invirtió en el equipo 'Beijing Institute of Technology' (BIT), convirtiendo al club en el primero del país asiático que cuenta con capital extranjero.
El equipo languidecía en la tercera división china y cuando los inversores españoles llegaron se encontraron con un grupo de jugadores "con sobrepeso".
Pese a ello, el grupo español CSSB optó por comprar -a cambio de una cantidad que no ha sido revelada- el 29% del equipo.
La empresa fue fundada por dos veteranos de la directiva azulgrana, el que fuera presidente de la entidad entre 2003 y 2010, Joan Laporta, y el exdirector general de la misma entre 2008 y 2010, Joan Oliver.
"Queremos implementar el mismo sistema que en el FC Barcelona, especialmente la creación de una academia para jóvenes futbolistas", explica Lola Sánchez, directora general de CSSB.
La operación del grupo español contrasta con la tendencia de los inversores chinos, que han invertido en clubes históricos como los anteriormente citados o, más recientemente, el Mánchester City y el Atlético de Madrid.
Además, los clubes del país asiático han desembolsado miles de millones para hacerse con los servicios de futbolistas extranjeros. Un dispendio que corre paralelo al deseo del presidente de China, Xi Jinping, de organizar algún día un Mundial y ganarlo.
'Cerdo y azúcar'
La realidad es bien distinta del otro lado. La media de edad de los jugadores del BIT, cuyo entrenador es el español Robert Ahufinger, es de 23 años y la mayoría de ellos son estudiantes.
"Una de las principales cosas que queremos cambiar es su mentalidad. Queremos convertirlos en ganadores", explica Ahufinger, que se dirige a sus futbolistas en español para que el intérprete que siempre le acompaña traduzca sus instrucciones al chino.
Cinco españoles trabajan en China en este proyecto, entre ellos tres entrenadores y un exdirector deportivo del CF Reus (Segunda división española), también propiedad de CSSB.
"Los primeros meses fueron muy difíciles, pero poco a poco hemos conseguido que tanto el club como los jugadores vayan asimilando nuestras ideas", asegura Ahufinger.
Sánchez recuerda por su parte que cuando se hicieron cargo del equipo "muchos de los jugadores estaban con sobrepeso. Comían lo que querían, como dulces en el descanso de los partidos".
Un nutricionista español los puso a dieta. El cerdo y los platos ricos en salsas fueron sustituidos por pollo, pescado y verdura hervida.
"Es más sano y metódico", apunta el estudiante de marketing He Zichao, de 25 años y que se desempeña como defensa.
"Antes, el club inspeccionaba nuestras habitaciones y nos imponía muchas reglas", recuerda. "Los españoles son más simpáticos pero a cambio piden que estés al 100% el día del partido".
'Objetivo: llegar a Primera'
China está haciendo esfuerzos para que su fútbol se desarrolle rápidamente. Está previsto que el número de academias aumente de las 13.000 actuales a 40.000 en 2020, con el objetivo de convertir al país en una superpotencia futbolística para 2050.
"Todo el mundo sabe que China tiene un gran potencial", apunta Sánchez. "Pero creemos que los clubes chinos no están desarrollando el fútbol de la mejor manera".
El objetivo del grupo español es ascender al equipo a la segunda división china y, de ahí, a primera.
"Si lo conseguimos el valor del club aumentará rápidamente, igual que el valor de nuestra inversión", razona Sánchez.
Luo Bin, subdirector general del equipo, corrobora las palabras de Sánchez al tiempo que asegura que el club no podría haber crecido si hubiese permanecido financiado al 100% por chinos.
"Vendimos para beneficiarnos de los conceptos futbolísticos más avanzados del panorama internacional", explica.