Mbappé demandó a dueño de restaurante por uso de su imagen en un Kebab ¿Cómo es eso?

El futbolista estrella Kylian Mbappé ha tomado medidas legales contra una cadena de restaurantes liderada por el influencer francés Mohamed Henni.

En una nota recabada por Fútbol Finanzas, la cadena en cuestión creó un kebab llamado "Mbappé", con un pan que ha sido descrito como "redondo como el cráneo de Mbappé". Esta acción ha provocado la indignación dentro del círculo cercano al jugador, incluyendo a su madre, Fayza Lamari, quien dirige la sociedad KMA, propietaria de los derechos del futbolista.

En un comunicado emitido por KMA, se ha expresado claramente la molestia por el uso del nombre de Mbappé sin autorización previa. Este incidente ha desatado una controversia sobre el uso comercial del nombre y la imagen de los deportistas sin su consentimiento.

La demanda presentada por Mbappé resalta la importancia de proteger los derechos de imagen de los deportistas y de tomar medidas legales contra el uso no autorizado de su nombre en actividades comerciales. Se espera que este caso genere un debate sobre los límites del uso de la imagen de los deportistas y la necesidad de respetar sus derechos legales.

Este incidente entre Kylian Mbappé y la cadena de restaurantes liderada por Mohamed Henni nos deja con importantes lecciones para el futuro, especialmente en el contexto del uso de la imagen pública en la era digital.

En primer lugar, es crucial reconocer y respetar los derechos de imagen de los individuos, especialmente de figuras públicas como los deportistas. El mal uso de la imagen puede tener consecuencias legales significativas y dañar la reputación tanto del individuo como de las marcas involucradas.

Además, este caso subraya la importancia de la transparencia y la autorización adecuada en cualquier uso comercial de la imagen de una persona. En la era digital, donde las redes sociales y la publicidad en línea pueden viralizar información rápidamente, es esencial que las empresas y los influencers actúen con responsabilidad y ética al utilizar la imagen de otros.

Finalmente, este incidente nos recuerda la necesidad de estar atentos y ser proactivos en la protección de nuestra imagen pública y nuestros derechos legales en un mundo digital cada vez más interconectado. La conciencia sobre la importancia de la privacidad y el control sobre nuestra imagen se vuelve fundamental en un entorno donde la información puede propagarse rápidamente y tener repercusiones duraderas.