Rafa Benítez deja el Dalian Pro chino y se habla de un regreso al Newcastle

El español Rafa Benítez anunció este sábado que deja el Dalian Pro, de la liga china, explicando que da este paso por motivos familiares, en medio de la pandemia del coronavirus.

El español de 60 años, que condujo al Liverpool al título de Champions League en 2005, ha dirigido al Dalian Pro desde julio de 2019.

"Desgraciadamente, como muchas otras cosas el año pasado, el covid-19 ha cambiado nuestras vidas y nuestros proyectos", afirma el extécnico de Liverpool, Real Madrid, Inter de Milán, Nápoles y Chelsea en su sitio internet.

"Desde hoy, mi equipo técnico y yo no estaremos tristemente más dirigiendo al Dalian Professional F. C.", añade.

"Ha sido una increíble experiencia y por ello querría dar las gracias a todo mi equipo técnico, entrenadores, médicos y empleados del club, así como a nuestros jugadores", señala.

"Su compromiso con nosotros, su apoyo durante el tiempo que estuvimos aquí y su esfuerzo han sido magníficos. La pandemia todavía está aquí, para todos nosotros y apoyar a nuestras familias ha sido una prioridad en el momento de tomar una decisión", concluye.

A Benítez le quedaba una temporada más en su contrato, estimado en unos 16 millones de dólares al año con el Dalian, en el noreste de China.

Los medios de comunicación británicos hablaron inmediatamente de un posible regreso del español, cuya familia sigue viviendo en Inglaterra, a la Premier League y en concreto al Newcastle United, donde era muy querido por los aficionados, club que dejó en junio de 2019 al final de su contrato.

Su sustituto Steve Bruce no ha conseguido hacerse un hueco en el corazón de los seguidores y el equipo ocupa ahora la decimoquinta plaza.

Benítez colocó al Dalian en la novena plaza entre 16 equipos en su primera temporada en China.

En la pasada campaña, que se vio afectada por el coronavirus, el equipo empezó mal y pareció estar en peligro a un punto del descenso.

Al final, Benítez consiguió la permanencia con comodidad, pero no escondió su desencanto por la forma de organizar el campeonato debido a la pandemia.

Todos los jugadores y técnicos estuvieron en una burbuja y no pudieron ver a sus familias durante más de dos meses.