Juez admite querella por el fichaje de Neymar
El diario Sport de Barcelona ha dado a conocer que, el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz ha admitido a trámite la querella interpuesta por el socio azulgrana Jordi Cases por el fichaje de Neymar ya que podría haber respondido a "una simulación contractual", pero no cree "urgente" por el momento citar al querellado, el presidente del club, Sandro Rosell. "En un auto, el juez acoge los argumentos de la Fiscalía pidiendo la admisión de la querella y afirma que de la documentación aportada por el Barcelona "se desprenden elementos suficientes" para investigar los hechos y que "podría apuntar a una simulación contractual presuntamente llevada a cabo entre los firmantes de los acuerdos" para el fichaje, cuyo montante económico el querellante cree que se ocultó a los socios" indicó Sport. "El juez considera que no es "urgente" llamar a declarar a Rosell hasta que no se practiquen varias diligencias que acuerda en este auto admitiendo la querella por apropiación indebida, entre ellas pedir a la FIFA la documentación del fichaje y al propio jugador el contrato que firmó con la sociedad N&N, propiedad de su padre, por el que le cedía sus derechos. También libra una comisión rogatoria a Brasil para solicitar del Santos CF el contrato de traspaso del jugador y acuerda pedir al Barcelona otros contratos que según el querellante sirvieron también para pagar el fichaje, en concreto unos por 7,9 millones por derechos de tanteo de tres jugadores juveniles del Santos FC y otros por 9 millones por dos partidos amistosos con el equipo argentino. Finalmente, acuerda que una vez analizados los documentos pedidos se cite a declarar en calidad de peritos a los empleados de Deloitte que hicieron la auditoría de las cuentas del Barcelona" agregó el rotativo catalán. El diario tambien ventila algunas acciones de las dos partes, que podrían ser fundamentales en el caso del ficaheje y su costo real. Dos movimientos sospechosos El auto recoge la tesis del fiscal de que hubo dos movimientos sospechosos, uno de ellos la firma en 2011 de un contrato ficticio de préstamo que en realidad era "una garantía" para el futuro fichaje de Neymar y otro la "mutación" de lo que era un acuerdo para su fichaje en una cláusula de penalización del mismo. El primero es un contrato firmado en Brasil el 15 de noviembre de 2011 entre el Barcelona, Neymar y N&N (empresa de su padre que iba a adquirir sus derechos en 2014) por el que el club manifestaba su intención de contratar al jugador en 2014, cuando terminaran sus derechos con el Santos CF. El Barcelona pactó abonar en ese momento a N&N 10 millones en virtud de un "contrato de préstamo" presuntamente simulado, que se trataba en realidad de una garantía para el futuro fichaje y que luego "mutó" a una cláusula de penalización del mismo. Y es que en el mismo contrato, en el que se acordó que el precio para adquirir a Neymar que tenía que pagar el Barcelona por "derechos federativos y económicos" era de 40 millones (en los que se incluían los 10 del "préstamo"), se estableció una cláusula de penalización en caso de incumplimiento del contrato por importe de 40 millones. Finalmente, el 3 de junio de 2013 Neymar, N&N y el Barcelona pactaron resolver ese contrato de adquisición porque el jugador se iba a incorporar antes de 2014 al club catalán, en virtud a un acuerdo de transferencia de derechos federativos del Santos CF que también se firmó por una cantidad que se desconoce. En ese momento, el Barcelona reconoció que no había cumplido el contrato de 2011 porque el jugador se había incorporado antes al Barcelona y que tenía que abonar la cláusula de penalización de 40 millones a N&N y, en el mismo acto, se firmó el contrato de trabajo del jugador. Según recoge el juez, en la documentación contable aportada por el Barcelona o bien no aparecen estos pagos o bien se apuntan por conceptos diferentes. Texto: Sport.es