En Italia dispuestos a sanar sus heridas ante Alemania en el arranque de la Liga de Naciones
Liga de Naciones
Italia, que en marzo fracasó en su intento de clasificarse al Mundial-2022 y que el miércoles perdió 3-0 ante Argentina en la Finalissima, afronta el inicio de un nuevo ciclo en su arranque en la Liga de Naciones de la UEFA, el sábado con un duelo exigente ante Alemania en Bolonia.
El seleccionador Roberto Mancini explicó en la previa al duelo ante los argentinos que ese partido era "el final de un ciclo", como homenaje a los jugadores que ganaron la Eurocopa en 2021 y la despedida como internacional de Giorgio Chiellini, y que con la Liga de Naciones empezaba "un nuevo ciclo", con la inclusión progresiva de jóvenes jugadores que den nuevo impulso a la Azzurra.
"Olvidemos el pasado. Recuperemos el entusiasmo y concentrémonos en el trabajo que nos espera para devolver a Italia al lugar en el que debe estar", afirmó Bonucci, de 35 años y nuevo capitán del equipo tras el adiós de su amigo Chiellini.
Ambos disputaron su último partido juntos el miércoles en Wembley y fue una pesadilla. Fueron superados por Lionel Messi y compañía: Chiellini fue cambiado en el descanso y Bonucci no pudo frenar a los argentinos, muy superiores.
El equipo que Mancini pondrá en el césped de Bolonia el sábado será muy diferente al de la Finalissima.
Varios hombres que fueron campeones de la Eurocopa el año pasado están lesionados, no fueron convocados o han abandonado ya la concentración (Marco Verratti, Jorginho, Lorenzo Insigne, Ciro Immobile, Federico Chiesa, Domenico Berardi).
"El seleccionador ha abierto las puertas a los jóvenes. Cometerán evidentemente errores, pero hay que tener confianza en ellos", afirma Bonucci.
Wembley ha supuesto una desilusión por esa derrota contundente ante Argentina, que llegó además en el estadio en el que Italia había logrado su título europeo hace menos de un año.
- La nueva etapa de Rüdiger -
Por su parte, el jugador alemán Antonio Rüdiger también tiene ligada su carrera a Londres, en su caso por su etapa en el Chelsea, con el que fichó en 2017 y al que abandona ahora. El jueves se anunció su fichaje por el Real Madrid.
Rüdiger también conoce el fútbol italiano, ya que militó en la Roma de 2015 a 2017.
Su sueño es ganar algo grande con Alemania.
"Más allá de la Copa de las Confederaciones de 2017, nunca tuve con la selección grandes victorias como las que tuve en el fútbol de clubes. Me gustaría compensar eso y preferiblemente ya en el Mundial de Catar", afirmó.
Rüdiger ganó peso en la Mannschaft cuando el anterior seleccionador, Joachim Löw, descartó a los históricos Mats Hummels y Jérôme Boateng después del Mundial de 2018.
Su sucesor, Hansi Flick, también ha apostado por este atlético defensor (1,90 metros), 50 veces internacional.
"Estoy muy contento por tener un jugador como él", afirmó Flick, que confía especialmente en la velocidad de Rüdiger, que en la Premier League llegó a ser cronometrado a 36,7 km/h.
Italia y Alemania forman parte de un potente grupo 3 de la primera categoría de la Liga de Naciones, que completan Inglaterra y Hungría.