España demostró que no es imbatible

La forma de jugar de España y los resultados que había cosechado desde 2008 fueron tan espectaculares que hicieron a muchos olvidar una verdad incontrovertible: cualquier selección, incluso la campeona del mundo y de Europa, puede perder. Esa verdad quedó comprobada el domingo. Pero lo que más sorprendió fue la forma en que Brasil la ratificó, con un 3-0 contundente en la final de la Copa Confederaciones. "De vez en cuando es conveniente perder, para que no creamos que somos imbatibles". Las palabras fueron del técnico Vicente Del Bosque después del repaso que Brasil le dio a su plantel en el estadio Maracaná. Palabras con peso, que otorgan una buena dosis de perspectiva y mesura. Del Bosque reconoció que los anfitriones sencillamente jugaron mejor que su Roja de principio a fin, potenciados por el gol de Fred a los dos minutos y la energía de un estadio Maracaná repleto y eléctrico. Además, el timonel le bajó los decibeles a la situación. Sí, fue un revés feo, en una final importante. Pero tampoco hay que sobredimensionarlo, y esta España es la misma, o muy similar, a aquella que ganó el Mundial en 2010 y la Eurocopa en 2008 y 2012. En otras palabras, nada de reacciones o cambios a la carrera. "Estamos contentos con cómo nos ha ido en los últimos años, con nuestro recorrido en cuanto a victorias y en cuanto a juego", analizó Del Bosque. "Creo que una derrota hay que valorarla, analizarla, pero tampoco puede ser un punto y aparte". "No nos sentimos contentos con esta derrota, y debemos analizarla, no debemos pasarle por encima, (pero) nuestros antecedentes nos dicen que debemos ser optimistas", agregó. Este fue el primer revés de España desde que cayó 1-0 ante Inglaterra en un amistoso en noviembre de 2011, una racha de 26 encuentros, aunque España no perdía en un partido oficial desde la primera ronda del Mundial de 2010. Se trata, por lo tanto, de una situación a la que este plantel no está acostumbrado, y de la que Del Bosque espera aprender bastante. "No debe haber conformismo, sino rebelarnos ante esta situación", sentenció. "Tenemos jugadores buenos, un estilo de juego definido, y no tenemos por qué estar cambiando por una derrota".