Chicharito, Un nuevo símbolo en el fútbol mexicano
Si durante uno de los feroces atascones de tráfico de Ciudad de México usted mira a su alrededor, seguramente se topará con el rostro juvenil de Javier "Chicharito" Hernández sonriendo desde un cartel publicitario. Delante suyo probablemente haya un camión de una panadería con otro aviso con su imagen. "Chicharito" vive en Inglaterra, donde juega con el Manchester United, pero está en todos lados en México, un país al que no le viene nada mal un nuevo ídolo. Su popularidad no se debe sólo al hecho de que tuvo un debut espectacular en la liga Premier inglesa, anotando 20 goles en todas las competencias y siendo elegido por los aficionados como el mejor jugador de Manchester United esta temporada, tras pasar de las Chivas de Guadalajara al Man U por 9,8 millones de dólares. O a que el sábado podría ser una figura clave en el choque de los ingleses con el Barcelona por la final de la Liga de Campeones en Wembley. Ocurre que sus festejos de cada gol --con los brazos estirados y la boca bien abierta, como sorprendido de su talento-- son el antídoto perfecto para los tiroteos, los secuestros y los hallazgos de fosas comunes que se suceden a diario en un país sacudido por la violencia del narcotráfico, que ha matado a más de 35.000 personas desde fines del 2006. En México, el éxito del "Chicharito" trasciende el fútbol. "Es el único en quien creemos los mexicanos", declaró la escritora Guadalupe Loaeza. "No creemos en los políticos, ni en las instituciones, ni en los partidos. Por meses y meses de la crisis, Chicharito nos da buenas noticias ante el mundo". El delantero tiene numerosos blogs de aficionados, incluido el oficial, "Locos por El Chicharito", y le han dedicado varias canciones, tanto en español como en inglés. Se espera que el partido contra el Barcelona del argentino Lionel Messi, considerado el mejor jugador del mundo, generará una teleaudiencia récord en México y hará las delicias de los dueños de bares y restaurantes. La cadena Televisa postergó la transmisión de un partido amistoso de la selección mexicana contra la de Ecuador a jugarse simultáneamente en Seattle, pues el "Chicharito" y Man U son la gran atracción. El encuentro será transmitido en vivo en una pantalla gigante en la explanada del estadio Azteca. México-Ecuador será transmitido luego del choque entre Barcelona y Manchester. Javier Ahedo, gerente de un restaurante de la cadena Chili"s en el centro de la capital, dice que multitudes de mexicanos siguen al Man U debido al "Chicharito". "El lugar se llena con cada partido y aunque jueguen otros equipos como Barcelona a la misma hora, la gente lo que quiere ver es a "Chicharito". Es una locura", señaló. Hernández es oriundo de Guadalajara y pertenece a una familia de jugadores. Su abuelo, Tomás Balcázar, jugó una Copa Mundial con México, lo mismo que su padre, llamado también Javier Hernández y apodado el "Chícharo", lo que hizo que a él le llamasen "Chicharito". No es el primer deportista que le levanta el espíritu a los mexicanos en tiempos de crisis. El beisbolista Fernando Valenzuela lo hizo a comienzos de la década de 1980 con espectaculares actuaciones con los Dodgers de Los Angeles. Y Hugo Sánchez, el jugador más exitoso en la historia del fútbol mexicano, ayudó a que el país se olvidase un poco de los bajones de la economía en los 90 fijando récords de goles con el Real Madrid. Los pocos futbolistas que llegaron a las ligas europeas militaron sobre todo en España e Italia, países con los que México tiene mayores vínculos culturales y lingüísticos. Lo novedoso del éxito del "Chicharito" es que se produce en Inglaterra, donde los jugadores latinoamericanos tienen problemas para acostumbrarse el frío, la humedad, la comida y el estilo de juego, más rápido y exigente en la parte física, que no encaja con el fútbol de técnica y habilidad que se practica en la región. Al mexicano lo ayuda el hecho de que su familia está con él. El delantero cuenta en las entrevistas que en Manchester puede comer las tortillas caseras preparadas por su madre. Hernández, además, podría convertirse en apenas el segundo futbolista mexicano que gana la Liga de Campeones, después de que Rafael Márquez lo consiguiera con el Barcelona. "Chicharito" cultiva una imagen de jugador limpio y amable, la cual es explotada en innumerables publicidades. El mexicano no parece tener un gran ego y los avisos en los que aparece a menudo incluyen a niños. Está siempre sonriendo y no le niega autógrafos a la gente. Todo el mundo lo elogia, desde periodistas hasta ejecutivos publicitarios y, sobre todo, aficionados. "Es mi ídolo, aunque sea de Chivas", expresó René Ocampo, vendedor de 38 años y fanático de Pumas. "Lo que nos enorgullece y nos hace sentir mejor como mexicanos. Si Argentina tiene a Messi y Brasil a Kaká, nosotros ya podemos decir que tenemos a Chicharito".