El CSKA se cobra la revancha y se lleva a Moscú 3 puntos claves
El CSKA de Moscú ganó este martes con remontada (1-2) al Basilea como visitante, equipo con el que había perdido 0-2 en casa, y se hizo con tres puntos claves para sus aspiraciones de obtener el pase a los octavos de final de la Liga de Campeones.
Con esta victoria el equipo ruso suma seis puntos, los mismos que ostenta el Basilea, en el Grupo A, que lidera el Manchester United, ya clasificado, tras ganar al Benfica, que sufrió su cuarta derrota consecutiva.
Los moscovitas, obligados a ganar para tener posibilidades de seguir en la Liga de Campeones, comenzaron el partido presionando muy arriba, pero sin conseguir inquietar el orden defensivo del Basilea, que prefirió ceder la iniciativa a la espera de la oportunidad de un contraataque.
En el minuto 8 una escapada del velocísimo delantero suizo Dmitri Oberlin sembró el pánico en la zaga de los rusos, pero elevó su disparo por encima de la escuadra de la portería defendida por Ígor Akinfeev.
Con el correr de los minutos, los dueños de casa se fueron haciendo con el control de las acciones, obligando al CSKA a replegar sus líneas.
La presión de Basilea siguió en aumento y los suizos tuvieron su premio en el min.32 cuando Luca Zuffi abrió el marcador con un globo desde la frontal del área, al recoger un rechace del portero ruso a un disparo a quemarropa de Oberlin, tras una pared que dejó en evidencia a la defensa del CSKA.
El gol en contra pareció despertó al cuadro visitante, que en los minutos finales de la primera parte comenzó a acercarse con cierta intención, pero sin mayor peligro, a la portería de Tomás Vlaclík.
Para la segunda parte el técnico del CSKA, el bielorruso Víctor Goncharenko, lanzó al campo al mediapunta Alan Dzagoev, recién recuperado de una lesión, para darle frescura al ataque de su equipo.
Con su incorporación, el CSKA empezó a crear sus primeras ocasiones de peligro para la portería del conjunto local.
Sin embargo, en el m.49 Zuffi, de tiro libre, estuvo a punto de conseguir el segundo tanto para su equipo, pero Akinfeev con una estirada providencial desvío el disparo.
El partido se abrió completamente y en el m.65, Dzdagoev, tras un pase de Natcho, resolvió con clase al quedar solo frente a Vaclík para establecer la igualdad.
El CSKA redobló sus ataques y en el m.79 Wernbloom aprovechó y mal despeje de Suchý para conectar un disparo que dejó sin opciones al guardameta del Basilea.
En los minutos finales el Basilea intentó volcarse sobre la portería de CSKA para conseguir igualdad, pero el cuadro ruso no solo aguantó el chaparrón, sin que se las ingenió para lanzar varios ataques de peligro.