Cárdenas presidente del Alianza se pronuncia en incidente
Alianza, F.C. es una institución deportiva con más de 47 años de existencia en el fútbol nacional, con una amplia trayectoria en la formación y guía de personas de bien, por medio del fútbol; hoy en día contamos con más de 300 niños, adolescentes y jóvenes adultos que participan en los 7 equipos de competencia (Sub-9, Sub-11, Sub-13 Sub-15, Sub-17, Sub-19 y 1ra División), además de las escuelas de fútbol. A todos luces está claro que no somos una organización cimentada y no unos aparecidos en el medio futbolístico local. Como dirigente, junto con nuestra familia, siempre nos hemos caracterizado por nuestra seriedad, honestidad y rectitud, aportando desinteresadamente a nuestro fútbol ideas, proyectos y mucho trabajo de corte social por medio del deporte; además, como profesional, somos reconocidos y exitosos en el medio. Las bases morales y cívicas que tenemos son sólidas y bien fundamentadas, bajo el amparo de una familia que no tiene mancha alguna como ciudadanos de este país, por el contrario hemos sido personas que le aportan positivamente a la sociedad. Es muy vergonzoso que se trate de ocultar o matizar la grave falta cometida por el joven Junior Torres, que es un jugador de 1.90 mt., que cobardemente agredió a un niño de 14 años por un balón de fútbol; no podemos tratar de desvirtuar lo acontecido, ya que el golpe que tiene mi hijo en la pierna no se lo hizo solo, fue producto de la agresión del mencionado adulto al menor de edad. Con la nota previa, se trata de desvirtuar el asunto principal, que es la agresión física del menor, con mentiras, indicando que se quería retrasar el juego, que no se quería dar el balón tiempo y demás, pero esto resulta infundado al margen de que esto ocurrió sobre el minuto 85 de juego, cuando el marcador iba 2 a 0 y Alianza era el amplio dominador del partido; además, NADA, pero nada, justifica de ninguna manera la agresión a un menor. Igualmente, se miente fehacientemente en la nota previa del Sporting, cuando se indica que ingresamos al campo de juego hasta el banquillo del Sporting, pues esto nunca ocurrió y ni si quiera tuvimos contacto alguno con la joven que mencionan; lo que sí es cierto es que fuimos junto con las unidades de Policía Nacional hasta la puerta de entrada del campo, pues solicitamos su intervención, como autoridad competente, para acusar penalmente al adulto por la agresión al menor, al cual iban a retener luego de concluido el encuentro, acto que no se pudo concretar, pues ocultaron al jugador en los camerinos y luego este se escabulló del estadio, por lo que no pudo ser aprendido la Policía Nacional. Prueba de la frustración del jugador Torres, fue que solo 3 minutos después del incidente con el niño, golpeó al atacante aliancista César Medina y por ello, el árbitro lo expulsó; en el video, que se puede acceder en el vínculo siguiente, se ve claramente el incidente de la expulsión: http://www.youtube.com/watch?v=Eo-_3XtsynA . Es evidente en las vistas del video que no hubo puñetazos entre jugadores (tal cual desinforma la nota previa), pues el único que golpeó con los puños al delantero César Medina fue el ya mencionado arquero Junior Torres. Queremos también acotar que ningún Directivo de nuestro club infirió agresión verbal alguna contra jugadores, fanáticos o directivos del Sporting; siendo esto otra falacia de la nota previa. Los invitamos a que accedan a nuestra página Web para que constaten quienes son los miembros de la JD de Alianza: http://www.alianzafc.net/index.php?option=com_content&view=article&id=60&Itemid=69 . Si fanáticos o seguidores del club gritaron desde las gradas del estadio, esto no lo podemos controlar nosotros, pues en todos los estadios del mundo esto es lo común, mientras no se llegue a agredir a nadie, físicamente. Por último, les pedimos a los lectores de esta misiva que solo por un segundo se imaginen cómo hubiesen reaccionado ustedes ante la agresión física de un adulto a un niño, más aun siendo su hijo. Nosotros a toda costa mantuvimos la compostura y tratamos de conducir la situación por medio de las unidades policiales. Concluimos nuestro escrito, expresando que las personas serias y con ética deben ser responsables y respetuosas con lo que escriben y remiten a los medios de comunicación, pues desinformar y sobre todo, apadrinar este tipo de acciones nefastas solo deja entrever la verdadera identidad y calidad humana de las mismas.