Brasil sumerge en una pesadilla a Argentina

BUENOS AIRES (AP) — De pelota parada y contragolpe, Brasil le propinó la derrota más dolorosa a su clásico rival Argentina en los últimos 16 años, evidenció las carencias de Diego Maradona en su rol de entrenador y como se fuera poco le complicó la clasificación al mundial de Sudáfrica 2010. La selección brasileña venció 3-1 a los albicelestes por las eliminatorias, en la primera caída como local que sufren desde 1993 cuando Colombia hilvanó la recordada goleada 5-0, casualmente un 5 de septiembre. "Brasil pegó duro y dejó a Argentina muy malherida", tituló el domingo el diario Clarín. "¡Que mazazo!", apuntó en su portada el diario Popular, mientras que para La Nación fue "una caída Gigante", en referencia el estadio Gigante de Arroyito del club Rosario Central, en el que Maradona pidió jugar porque supuestamente los hinchas se harían sentir más que en el Monumental de River Plate. Brasil (30 puntos) se convirtió en el primer país sudamericano en avanzar al mundial y dejó a su eterno rival en una incómoda posición, sólo aliviada por las derrotas de sus perseguidores: Ecuador (20) cayó 2-0 ante Colombia (20) y Uruguay (18) 1-0 con el eliminado Perú. Argentina (22) conserva el cuarto lugar y último que otorga pasaje directo a Sudáfrica cuando restan tres fechas. "Rosario no resolvió el gran problema: la selección no es un equipo y Diego no le encuentra la vuelta... Brasil fue implacable y nos dio una lección de jerarquía y juego colectivo", afirmó el diario deportivo Olé. No fue el "jogo bonito" de Brasil lo que puso de rodillas a los once de Maradona sino dos jugadas de pelota parada en los goles de Luisao y Luis Fabiano, con complicidad de la defensa argentina, y un veloz contragolpe que nació de una pelota perdida por el astro Lionel Messi, seguido por un pase letal de Kaká al atacante del Sevilla, que definió con clase por encima del guardameta. El saldo fue igualmente positivo a favor de los brasileños en los duelos particulares: Dunga sigue invicto ante Argentina a nivel mayores (dos ganados y un empate). Maradona mordió el polvo en su primer clásico al frente del seleccionado y en las actuales eliminatorias suma tres derrotas contra dos victorias. En la partida de estrellas, Kaká fue más determinante que Messi, quien con la casaca del seleccionado argentino no brilla como en Barcelona. "Messi tenía en el choque ante Brasil la oportunidad de afianzar una esperanza que está en marcha desde su aparición, con la salvedad de que a pesar de estar fogueado en la alta competencia, tiene mucho que aprender con la celeste y blanca", opinó La Nación. "Kaká fue mucho más influyente, resultó la figura de la cancha", dijo Clarín. Argentina no tiene tiempo para lamentos. El miércoles visitará a Paraguay (27) en Asunción y todavía depende de sí misma, pero un nuevo traspié agitaría los peores fantasmas: México 1970 fue el último mundial que la tuvo ausente. "Al final de la noche, todos hacían cuentas para ver si el mundial estaba más cerca. Nadie dudaba de que el equipo todavía está lejos", sentenció La Nación.