Ioka culmina el año 2020 para el boxeo con nocaut ante Tanaka
Como es tradicional, Japón se convirtió en el escenario para despedir el año sobre el ring
El 2020 acaba para el boxeo de la mejor manera. En Japón se pudo cumplir con la cita tradicional que pone una gran velada en el día de fin de año y además se hizo con público. El final de la pesadilla está más cerca. No hubo silencio, en buena parte por la algarabía de cada esquina al festejar los golpes. Fuera de los extradeportivo, se esperaba un bonito duelo sobre el ring y se vio.
Kazuko Ioka noqueó en el octavo asalto a Kosei Tanaka para retener el mundial WBO del supermosca. El aspirante quería hacer historia. Óscar de la Hoya se proclamó monarca en cuatro divisiones con 22 peleas. Tanaka podía hacerlo en 16, pero tendrá que esperar. Tiene cuatro oportunidades más para superarle.
El boxeo japonés muchas veces recibe menos foco del que merece y este jueves se volvió a demostrar. Ioka había hecho el camino que pretendía Tanaka: campeón en el mínimo, minimosca, mosca y supermosca. Es decir, dos top estaba frente a frente. Pese a esa calidad de ambos y que Tanaka era el aspirante, la iniciativa la quiso llevar él. Ritmo alto, acciones veloces y golpes duros por ambas partes.
El retador ponía el ritmo, pero el campeón le contragolpeaba con gran maestría gracias a una gran defensa de tronco. Había calidad por ambas partes y lo lógico es que lo que ocurrió: una pelea muy cerrada. Así transcurrieron los primeros cuatro asaltos. Tanaka variaba los planos e Ioka siempre se cubría abaja y se quitaba mucho trabajo abajo.
La pelea era realmente difícil de puntuar, pero en el quinto asalto Tanaka falló. Lo venía haciendo e Ioka lo estudió. En los pesos bajos los intercambios están a la orden del día, y también sucedió en esta pelea. El aspirante bajaba la derecha cuando cruzaba y con volado de izquierda Ioka lo envió a la lona. Quedaban pocos segundos y el retador se reía. Quería mostrar que no le había hecho daño, pero el camino estaba marcado. La misma acción le llevó al piso en el sexto asalto. Ioka tenía todo bajo control. Dejó que Tanaka trabajase en el séptimo, le blocó todo y le volvió a cazar.
Tanaka es joven y duro, por lo que resistió en pie, pero estaba KO tras otro crochet de izquierda del campeón y al árbitro paró la pelea en el octavo round. Bien parado. Ioka demuestra que es un campeón sólido y puede mirar al ganador del Estrada vs Chocolatito. Tanaka tendrá que rehacerse. Le esperan también en Estados Unidos con el sueño de superar a De la Hoya todavía posible. Debe regresar al gimnasio y pulir errores. El público agradeció su valentía con un sonoro aplauso. Lo merecieron ambos. Ofrecieron un gran espectáculo y todos volvimos a disfrutar de una gran pelea con el calor del público de Tokio. La mejor manera de cerrar este complicado 2020.
Texto: Álvaro Carrera (Diario AS)