Segui lanza "dardos" a la defensa de Clemens
David Segui testificó el jueves para la fiscalía en el juicio por presunto perjurio que se le sigue a Roger Clemens, y habría sido un mejor testigo si tuviera una mejor memoria. De todas formas, el ex pelotero cubano-estadounidense sí pudo recordar un momento específico que ayudó a los alegatos del gobierno: una conversación telefónica que sostuvo hace 11 años con el preparador físico del pitcher ganador de siete premios Cy Young. "Mencionó que guardó dardos para quitarse de encima a su esposa", dijo Segui. Con esas palabras, el ex pelotero dio aval al testimonio del testigo estrella del juicio de seis semanas. Brian McNamee dijo la semana pasada al jurado que guardó una aguja y otros materiales usados en una presunta inyección de esteroides para Clemens en 2001. McNamee testificó que con ello estaba tratando de tranquilizar los temores de su esposa acerca de que él cargaría con toda la culpa si se descubría el fármaco. "Mencionó que la relación entre Brian y Roger había puesto tensión sobre su vida marital", dijo el pelotero. Segui, quien ha reconocido haber consumido fármacos para mejorar el desempeño en su carrera en las Grandes Ligas —en la que jugó por 15 años para siete equipos_, no tenía permitido decir que esos "dardos" en realidad significaban "agujas". El juez dictaminó que los jurados tendrán que hacer esa suposición ellos mismos, a menos que McNamee regrese al estrado a explicar. Segui, quien se hizo amigo de McNamee cuando se conocieron en Toronto la temporada de 1999, tampoco tenía permitido mencionar una segunda conversación similar sobre "dardos" porque no pudo recordar lo que pasó. Estaba seguro de que ocurrió antes de la publicación del Informe Mitchell en 2007 sobre el uso de fármacos en el deporte, pero éso fue insuficiente para el juez federal de distrito Reggie Walton. "Harán caso omiso de la pregunta", dijo el juez a los jurados, quienes abandonaron la sala del tribunal mientras los abogados debatían el asunto. "No soy bueno con las fechas. No llevo un registro de mi vida", afirmó Segui, quien dijo que tampoco recordaba en qué momento de la temporada de 1999 fue transferido de Seattle a Toronto. Clemens está acusado de mentirle al Congreso en 2008 cuando negó haber consumido esteroides y hormona del crecimiento humano. McNamee dijo que inyectó a Clemens con ambas sustancias y que guardó los sobrantes de la inyección de 2001 en una lata de cerveza. Los abogados de Clemens han insinuado que McNamee evocó la evidencia luego de que se volvió objeto de investigación en 2007. El juez admitió el testimonio de Segui porque parece contradecir ese argumento, lo que representa una victoria significativa para la fiscalía. Se prevé que otro testigo, Anthony Corso, un ex cliente de preparación física de McNamee, rinda un testimonio similar el viernes y que el gobierno cierre su alegato.