Medias Rojas sacuden a unos dormidos Rays
El elevado de David Ortiz a lo profundo del jardín derecho parecía de puro trámite para Wil Myers. Pero el jardinero de los Rays se despistó y dejó que la pelota picara. Las consecuencias fueron nefastas para Tampa Bay. El doble por regla de Ortiz abrió las puertas para un racimo de cinco carreras en la cuarta entrada, que permitió a los Medias Rojas de Boston voltear la pizarra y encaminarse a una victoria por 12-2 el viernes, en el primer juego de la serie de primera ronda en los playoffs de la Liga Americana. "Fue culpa mía, nadie me gritó nada", dijo Myers, descartando que alguien en el cercano bullpen de los Medias Rojas hubiera intentado confundirle. "Hubo un momento en que veo de reojo a (Desmond) Jennings, acercándose y ahí me detuve", añadió Myers, en alusión al jardinero central. Un par de jonrones solitarios, de Sean Rodríguez y Ben Zobrist, pusieron en ventaja 2-0 a los Rays, cuyo abridor Matt Moore no permitió hits en los tres primeros episodios. Pero un rosario de descuidos de los Rays, un equipo que goza de la reputación de ser uno de los mejores en cuanto a defensa en las Grandes Ligas, saboteó la apertura de Moore. Diez Medias Rojas fueron a batear en un infame cuarto episodio de los Rays, en el que un doble productor de dos carreras de Mike Napoli niveló 2-2 el juego. Aparte del batazo que Myers dejó caer, el jardinero izquierdo Rodríguez midió mal una línea de Will Middlebrooks que se estrelló contra el Monstruo Verde, permitiendo que Stephen Drew anotase desde la primera. En la jugada previa, Drew se embasó con un roletazo por la inicial, al tardarse Moore para recibir el tiro de James Loney, lo que facilitó que Gomes anotara desde la intermedia. Más tarde, Jacoby Ellsbury se ponchó abanicándole, pero un pásbol del receptor venezolano José Lobatón anuló el que hubiese sido el tercer out, y un posterior sencillo al derecho de Shane Victorino remolcó a Drew. Lo llamativo de todo fue que ninguna de esas jugadas fue anotada como un error. A todo esto, Myers --un candidato al Novato del Año-- vivió un verdadero suplicio al escuchar cómo su apellido era coreado sarcásticamente por los fanáticos de los Medias Rojas. "Fenway Park es un estadio traicionero en los jardines", indicó Victorino, custodio del derecho por los Medias Rojas. Tal vez, los Rays, acusaron los efectos de su incesante trajín desde que salieron de Tampa Bay la noche de 23 de septiembre. El Fenway Park de Boston era el quinto parque distinto que los Rays visitaban en las últimas dos semanas, período en el que primero debieron ganar un juego de desempate en Texas y luego el duelo de wild cards en Cleveland. "Veníamos jugando muy bien, sin cometer errores. Ahora cometimos una gran cantidad, ya sea cubriendo la primera base, no estar pendiente del plato o dejar pasar un tercer strike", comentó el mánager de los Rays Joe Maddon. "...Pero esto no nos va a afectar mentalmente, vamos a responder". Boston no tuvo piedad y acabó de despegarse con tres carreras más en el quinto, dos mediante un doblete de Jarrod Saltalamacchia y otra gracias a un sencillo de Ellsbury. Moore no pudo pasar del quinto al permitir siete hits y ocho carreras --siete limpias-- con cuatro ponches y dos boletos. Tras arrancar con cuatro ponches seguidos, el abridor de los Medias Rojas fue castigado con los jonrones de Rodríguez en el segundo acto y de Zobrist en el cuarto. Pero el zurdo se asentó con la amplia diferencia al cubrir siete innings y dos tercios, con pelota de tres hits y dos carreras. Recetó siete ponches y concedió dos boletos, retirando a 11 bateadores en forma consecutiva entre el cuarto y séptimo episodios. Boston anotó cuatro veces más en la baja del octavo. Cada uno de sus titulares bateó por lo menos un hit y anotó una carrera, algo que sólo ha sido logrado tres veces en postemporada, sumándose a los Yankees de Nueva York (1936) y Cardenales de San Luis (1934). Pese a que llovió en las horas previas, el juego pudo comenzar en el momento previsto para una ceremonia en la que se rindió un homenaje a las víctimas y socorristas de los atentados en el maratón de Boston el 15 de abril, que dejaron tres muertos y más de 200 heridos. El segundo juego será el sábado y Boston buscará ponerse 2-0 arriba con John Lackey en el montículo frente a David Price, el as de los Rays que el lunes pasado cubrió la ruta completa en el desempate ante los Vigilantes de Texas. Por los Rays, el cubano Yunel Escobar de 4-0. El venezolano Lobatón de 3-0. Por los Medias Rojas, el dominicano Ortiz 4-1 con dos anotadas.