Porzingis se adjudica la competencia de habilidades en la NBA
Fin de semana de las estrellas en Nueva Orleans
La noche central del All Star Weekend, muchas veces la más recordada (sobre todo cuando el concurso de mates acompaña) arrancó en Nueva Orleans con el concurso de habilidades, esa prueba que ejerce de calentamiento pero que lleva catorce años celebrándose aunque siempre parezca una recién llegada al fin de semana de las estrellas.
Un concurso en el que se prueban velocidad, dribbling, pase y tiro y que siempre ganaban los bases hasta que han irrumpido esa generación de pívots que lo están cambiando todo. Tanto que hace un año en Toronto ganó Karl-Anthony Towns y este, en NOLA, ha ganado Kristaps Porzingis. El letón de los Knicks que se hizo mayor en Sevilla y que la próxima vez que vuelva a un All Star será para jugar el partido del domingo. El año que viene, si no pasa nada extraño. Lo que siempre es algo a considerar cuando se juega en New York Knicks.
Bajitos y gigantes se agruparon en dos lados del cuadro de los que salieron Gordon Hayward y Porzingis. El letón fue tan rápido como el alero de los Jazz y metió el triple que remata el circuito a la primera.
Ese circuito, recuerdo, incluye un dribbling de costa a costa, un pase que tiene que entrar por una circunferencia, una bandeja en un lado de la pista y un triple en el otro.
Antes de ganar, el Unicornio derrotó a Jokic, que se hizo un lío en semifinales, y a Cousins. Y Hayward eliminó a John Wall y después a Isaiah Thomas porque metió el sexto triple después de cinco fallos por barba. Mientras, entre números musicales y mascotas desatadas, las gradas se fueron llenando para los grandes concursos de la noche. Los que de verdad pueden convertir en inmortal un All Star Weekend.
Texto: Juanma Rubio (as.com)