Lakers vencen 89-67 a Celtics y obligan a séptimo juego
Prepárense Boston y Los Angeles, pues la serie de campeonato entre los Celtics y los Lakers se irá a las últimas instancias. Kobe Bryant anotó 26 puntos, el español Pau Gasol agregó 17 y 13 rebotes, y los Lakers extendieron enfáticamente la final de la NBA a un decisivo séptimo partido al aplastar el martes 89-67 a los Celtics en el sexto juego. Ron Artest agregó 15 puntos para los Lakers, que alejaron la posibilidad de ser eliminados el martes al adquirir una ventaja de 22 puntos durante una deslumbrante primera mitad. Con sorprendente facilidad, los actuales campeones extendieron la final al límite por primera vez desde el 2005. Un campeón será coronado el jueves en el Staples Center. Dos años después de que los Celtics pusieron punto final a la serie de campeonato con una paliza de 39 puntos sobre los Lakers en el sexto partido, en esta ocasión Los Angeles hizo del sexto juego una larga pesadilla para Boston, que tuvo el segundo total más bajo de puntos anotados en la historia de las series finales de la NBA. Sólo la tristemente famosa actuación de 54 puntos del Jazz de Utah ante los Bulls de Chicago en 1998 fue peor al desastre ofensivo del martes para Boston, que sólo acertó el 33% de sus tiros a la canasta y sufrió una ventaja casi abismal de 52-39 de los Lakers en los tableros. "Hicimos un gran trabajo", indicó Bryant. "Necesitamos llegar con la misma energía, la misma dedicación a la defensiva (para el séptimo partido)". Ray Allen anotó 19 puntos por los Celtics, que sufrieron un feo tropezón cuando estaban a punto de ganar su 18vo título, una cifra sin precedentes en la historia de la NBA. Resulta que sus añejos rivales si se están tomando en serio el obtener su 16to campeonato. Bryant capturó 11 rebotes, y Gasol encabezó a los Lakers con nueve asistencias en un notable partido de recuperación para Los Angeles, que dominó el encuentro desde los primeros minutos al controlar los tableros y desplegar una defensiva implacable. Los sustitutos de los Lakers se hicieron cargo gran parte del resto del partido, al apabullar a los reemplazos de los Celtics, que no pudieron organizar una ofensiva. "Nuestra defensiva fue buena, nuestros rebotes mejores. Tuvimos un poco de suerte en algunos rebotes ofensivos y defensivos y esas cosas cambiaron el curso del partido", indicó el entrenador de los Lakers, Phil Jackson. Estos rivales se han enfrentado en un séptimo encuentro cuatro veces de sus 12 choques previos en la final, y Boston ha ganado esos cuatro juegos. Sin embargo, esto no ocurre desde 1984 y no le ha pasado a Bryant, quien parece decidido a reclamar su lugar entre los inmortales de la NBA al buscar su quinto campeonato de la liga. "Pensé que jugaríamos mejor, obviamente", afirmó el entrenador de los Celtics, Doc Rivers. "Creí que estábamos listos... Jugamos un partido individualista esta noche tanto ofensiva como defensivamente. Nunca nos dimos una oportunidad ofensiva, porque nunca confiamos los unos en los otros. Todo el mundo salió a hacer su propio esfuerzo".