Radar: Fallo de la Corte y movimientos ciudadanos

El fallo de inconstitucionalidad del contrato minero emitido por la Corte Suprema de Justicia y el movimiento ciudadano que llevó a la Corte a pronunciarse de forma expedita fueron los temas de discusión este domingo 3 de diciembre en Radar. 

Luego de un mes de protestas y cierres a nivel nacional, la Corte Suprema se pronunció finalmente el 28 de noviembre, declarando que el contrato entre el estado panameño y Minera Panamá violaba 25 artículos de la Constitución panameña.

“No solamente lo que se violó de la Constitución, la Corte en ese fallo bien analizado, bien sustentado, enumeró todas las convenciones en materia de derecho ambiental y derechos humanos que fueron desconocidos. Se pasaron por alto esos tratados que son parte del Derecho del estado panameño desde el momento que lo ratificó”, apuntó el Procurador de la Administración, Rigoberto González Montenegro.

La Corte Suprema de Justicia ha demorado en el pasado años para pronunciarse sobre un caso. Para referencia, en 2009 se interpuso un recurso de inconstitucionalidad contra la concesión de Petaquilla, predecesora de Minera Panamá, que la Corte tardó 19 años (2018) en resolver y que involucraba un contrato de 1997. Esta vez, no tardaron ni un mes.

La recién descubierta eficiencia y celeridad de la Corte fue el resultado de la presión ciudadana que exigía respuestas. 

Uno de los grupos que alzó la voz fue la Universidad de Panamá, que realizó una marcha masiva con participación de las sedes alrededor del país.

“No solamente en el campus, en cada centro regional salió la universidad. Eso fue el último empujón que se necesitaba para poder crear más conciencia”, apuntó el rector de la casa de estudios, Eduardo Flores. 

Flores también recordó que lleva años luchando en contra de la minería a cielo abierto en Panamá, y que en 2014 presentaron una iniciativa a la Asamblea Nacional que en ese momento no llegó ni a primer debate. “Ahora, capaz conseguimos más de 4 millones de firmas. Es importante que el país haya creado una conciencia ambiental. Yo espero que esto perdure.”

Diferentes grupos organizados jugaron un rol clave, entre ellos grupos indígenas, maestros, trabajadores de la construcción y otros colectivos sociales. Una iniciativa que logró llevar a muchos jóvenes a las calles fue el movimiento SalDeLasRedes. 

José Isaac González, uno de los organizadores de este movimiento, señala que su objetivo es dar un uso estratégico a las redes, para ayudar la movilización pacífica y responsable de quiénes quieran actuar por el bien del país.

“Lo que hizo que las personas salieran a protestar no fuimos nosotros, fue una rabia, un descontento generalizado que el gobierno. No es solo este gobierno, es el sistema corrupto que hay, que ha ocasionado que las personas estén lo suficientemente molestas para ir a la calle y protestar. Y por eso se llenaron las calles”, explicó González.

Comentó que muchos panameños no forman parte de colectivos organizados, gremios o sindicatos, pero que igual tienen un gran interés en los asuntos nacionales.

Para él, se lograron dos victorias importantes, el fallo de la Corte y la moratoria minera. Sin embargo, destaca que no hay que bajar la guardia, hay que mantenerse vigilantes al plan de cierre de la mina y la inhabilitación del puerto de Punta Rincón, entre otros temas.