Radar: Actos imprudentes y una desconfianza creciente

La celebración del aniversario de Panamá Solidario en Atlapa continúa generando críticas de diversos sectores, mientras la falta de confianza en las autoridades complica el diálogo por la Caja de Seguro Social y genera llamados a una Constituyente.

La fiesta de la discordia

Carlos Barsallo, de Transparencia Internacional, calificó el evento en Atlapa como un acto imprudente frente a una población que está “dolida, cansada y hastiada.”

También cuestionó el rol de los asesores, quienes, en vez de evitar que el acto se diera en primer lugar, han buscado excusar a medias lo sucedido, incluso intentando cambiar el significado de palabras como “baile” o “celebración.”

La periodista Alexandra Ciniglio destacó que quienes estaban presentes en la fiesta son los mismos que a través de publicidad dieron el mensaje de que los jóvenes podían matar a sus abuelos o que entraban a los barrios a arrestar a personas por tener un par de cervezas.

Sostuvo que cuando el gobierno manda un mensaje tan contradictorio entre lo que dice y lo que hace, provoca una ruptura en los canales de comunicación que lo hacen ver indolente y desconectado con la realidad. También mostró su preocupación con la falta de criterio o autoridad de quienes rodean al Presidente para decirle que la situación no estaba bien.

Por su parte, la exlegisladora Teresita Yániz de Arias criticó duramente la incapacidad del gobierno de pedir disculpas y asumir la responsabilidad moral por los hechos cometidos. Aseguró que “hay gente que ha salido a decir cosas que dan tanta vergüenza como el acto en sí.”

Constituyente

Sobre la Constituyente como posible vía para implementar cambios estructurales al Estado, Yániz de Arias dijo no estar en contra del método en sí, pero afirmó que se debe conocer primero el método de escogencia de los constituyentes y cuáles son los temas que se abordarían.

Expresó su escepticismo hacia aquellos que piden un cambio completo a la Constitución, ya que eso implicaría modificar elementos básicos como la libertad de expresión, la inviolabilidad del domicilio y el fuero sindical.

La exlegisladora invitó a las personas que se sientan inconformes con la situación actual leerse la Constitución y marcar cuáles son los artículos exactos que consideran necesitan un cambio.

Advirtió que cambiar la carta magna no es tan sencillo como cambiarse la corbata, ya que es el la base de la convivencia social, y advirtió que debe hacerse con cuidado, ya que la situación siempre puede empeorar.

El diálogo agoniza

El diálogo de la Caja de Seguro Social sufrió un revés en días pasados, luego que algunos gremios de trabajadores se levantaran de la mesa.

El exdirigente Mariano Mena advirtió que no le ve ningún futuro al diálogo, ya que la ausencia de los trabajadores, además de los cuestionamientos al facilitador, le restan legitimidad.

Agregó que el problema no está solo en el diálogo, sino en la economía, que, asegura, “cada día ha ido tirando a los trabajadores al subempleo” y en la evasión de empresas que cierran y vuelven a abrir bajo otro nombre para no pagar lo que les corresponde.

Para el consultor Jorge Nicolau, la falta de confianza entre las partes es uno de los mayores obstáculos del diálogo. Afirmó que se necesita explicar de manera sencilla y transparente el problema a la población, ya que no se puede tener un diálogo si no hay claridad por parte de todas las partes y que todos entiendan la magnitud del problema. También invitó a que busquen ejemplos de lo que hacen otros países.

Mujeres pioneras

Esta semana, destacamos a dos mujeres pioneras en el ámbito de la justicia: la exmagistrada Esmeralda Arosemena de Troitiño y la exprocuradora de la Administración Alma Montenegro de Fletcher.

Sobre la igualdad entre hombres y mujeres, para la exmagistrada, está reconocida en la Constitución, pero a veces la puesta en práctica se queda en el plano de la igualdad formal. De Troitiño considera que se deben tomar acciones concretas por parte tanto de las instituciones como del sector privado.

Montenegro de Fletcher destacó la importancia de que las mujeres, más allá de querer a sus familias o pareja, se quieran a sí mismas, y que hagan el esfuerzo de transformar la estructura mental que se les enseña desde pequeñas.

Agregó que estas también cuando lleguen a puestos ejecutivos, deben buscar crear las condiciones y proveer las herramientas que estas necesitan, como por ejemplo, una ducha decente.