El impacto de la extradición del expresidente Ricardo Martinelli en el panorama político
La extradición del expresidente Ricardo Martinelli trajo consigo retos sin precedentes para las débiles instituciones y la sociedad panameña. Desde su llegada al país, el debate se ha centrado en lo jurídico y médico dejando a un lado el impacto político y social de su envío.
El programa Radar de este domingo 17 de junio realizó un análisis global de cómo el hecho seguirá impactando a los principales actores, tomando en consideración que la elección de la junta directiva de la Asamblea Nacional (AN) está a dos semanas y el creciente descontento de la ciudadanía con el gobierno de Juan Carlos Varela.
El expresidente fue enviado a Panamá por las autoridades estadounidenses el pasado lunes 11 de junio por los delitos de inviolabilidad del secreto y derecho a la intimidad, así como el delito contra la administración pública.
Para la exdiputada Teresita Yáñiz de Arias, el Órgano Ejecutivo manejó con "torpeza" la extradición del exmandatario y apuntó que Martinelli "colaboró" a darle al hecho un "modo espectáculo", que al final lo ha perjudicado.
"Más allá de los análisis médicos y de las opiniones que se dieron, la gente que lo vio cómo se bajaba del avión, la gente que lo vio dando brincos en El Renacer y lo ves dos horas después, con las manos en la cabeza, diciendo que lo quieren matar y que está secuestrado... Tampoco somos tan crédulos, tan inocentes", apuntó.
Según Yániz de Arias, el expresidente no solo terminó de "envenenar y pervertir" las instituciones durante su gestión sino que llevó a cabo un progreso de transfuguismo político que no se había visto en el país.
"Aquí no se puede hacer una apología de un hombre que le ha hecho tanto daño al país. Tampoco estoy de acuerdo con que sigamos repitiendo, como unos loros, que este país recibe con alegría, con esperanza y hasta con algún entusiasmo el regreso de Ricardo Martinelli", manifestó.
De acuerdo con el analista Rafael Mezquita, la extradición del exmandatario se da en instantes en que el actual presidente de la República "tiene uno de los rechazos más alto de la opinión pública", generando un ambiente propicio para comparaciones con la pasada administración y el "boom económico" que experimentaba el país.
Mezquita consideró que el exmandatario aprovechó estos días "para venderse como mártir" y el "salvador de la patria". "A pesar de la torpeza del gobierno, creo que el martirologio no se consumó. Creo que las instituciones lentas al final de cuentas funcionaron, hicieron lo posible por trabajar bien, entendiendo que había una indicación del Departamento de Estado", expresó.
Mezquita no descartó que el expresidente evalúe aspirar a una candidatura para el próximo torneo electoral, que dependerá del desenlace de esta coyuntura jurídica y le podría volver inmune a otros procesos que reposan en la Corte Suprema de Justicia (CSJ).
"En el momento que logra una candidatura viene la protección esa que tiene el Tribunal [Electoral] (...) e inmediatamente consigue la inmunidad, que en este país es impunidad", declaró.
Para Mezquita, el expresidente tendrá durante los próximos 40 días la posibilidad de "reevaluar" su entrada a Panamá, retomar parte de los espacios que perdió en el partido Cambio Democrático (CD) y valorar si lo que hizo "le dio rédito político".
En tanto, la politóloga y psicóloga Celia Moreno ve con preocupación que la ciudadanía haya olvidado los enfrentamientos en San Félix, Bocas del Toro y Colón y los abusos de autoridad en el periodo presidencial de Martinelli.
"El señor [Ricardo] Martinelli instauró una corrupción sistemática en el país, resquebrajó las instituciones que ya estaban endebles, violó los derechos humanos de muchos no solamente con las escuchas [telefónicas], trató de modificar e instalar valores mercantilistas y materialistas y es el modelo más negativo que hemos tenido para la ciudadanía. Me parece que eso ya es un daño monstruoso para nuestra sociedad", opinó.
Moreno consideró que "darle una especialidad" al expresidente no es lo mejor, al señalar que un Estado de Derecho "todos somos iguales". Además, apuntó que "es un progreso para la justicia" que un exmandatario enfrente por primera vez un juicio.
"No tiene más derecho que los internos. Pregunten a los internos que están ahí en qué situaciones están", dijo en Radar. "Se le respetó sus derechos, estaban los doctores que le practicaron un examen, pero si él no se toma su pastilla, si hace su show mediático, él provoca también que se le suba la presión".
El abogado Rubén Castillo aseguró que el proceso contra Martinelli es una "gran prueba" para demostrar que las instituciones funcionan con independencia y para la ciudadanía garantizar que el Ejecutivo "no tenga que ver con el proceso que se lleva a cabo".
Asimismo, el jurista espera que lo sucedido con Martinelli permita a la ciudadanía asumir el poder y certifique la transparencia en este proceso.
"Siempre he dicho que tenemos una democracia sin ciudadanos. Dejamos que las instituciones funcionen y cuando hay una crisis, los ciudadanos aparecemos tímidamente. Ese problema tenemos que romperlo con esta coyuntura", expresó.
Castillo destacó que el exmandatario tendrá que concurrir a su "día de juicio" y ahí demostrar "lo que considera puede justificar sus actuaciones o simplemente rechazar de plano la acusación".
"Está acreditado el hecho punible, el delito. Ese delito habrá que conectarlo con la persona que lo cometió, el expresidente Martinelli u otros. Pero el hecho está ahí, eso no se puede descalificar, que hubo escuchas", indicó.
Por su parte, el exvicepresidente y miembro de Cambio Democrático (CD) Arturo Vallarino desmintió que Martinelli haya perdido espacios en el colectivo y resaltó en su intervención que busca la unidad del mismo. Añadió que el exmandatario no ha pedido una especialidad sino "los derechos que la ley reconoce a todos los panameños".
"El líder político más importante que ha habido en este país es Ricardo Martinelli y que hasta este momento es inocente", apuntó en Radar. "Hasta tanto la Corte [Suprema de Justicia] no tome una decisión, Ricardo Martinelli es inocente. Tenemos la obligación de presumir la inocencia".
Vallarino agregó además que el expresidente lo único que esperaba era que se cumpliera con lo establecido por el Departamento de Estado de EEUU en materia de su extradición: que al llegar se le realizara un examen médico general, particularmente sobre las enfermedades crónicas, y que se respete el principio de especialidad.
"Eso aparece allí plasmado. Eso no lo inventó Martinelli, lo puso el Departamento de Estado", expresó.
El expresidente de la República tiene dos citas con el proceso de las escuchas telefónicas en la Corte Suprema: una el próximo martes 19 para buscar un cambio de medida cautelar y una audiencia el 25 de junio en la que se podría formalizar su acusación.