Lo que no se vio en el día 17 del Mundial: ¿Un nuevo Cristiano Ronaldo?

Doha, Qatar/Marruecos y España hicieron un partido equilibrado y, aunque la selección africana tuvo que saber defenderse de una avasalladora presión española en el fin del juego, ninguna de las dos llegó al gol en los 120 minutos con el balón rodando.

Con el 0 a 0, la decisión fue a penales por segunda vez en este Mundial. El mundo paró por algunos minutos para ver la definición entre la favorita selección de Luis Enrique y el sorprendente conjunto marroquí.

Hasta los pasajeros en aviones encontraron formas de acompañar la disputa.

Fue entonces que la primera gran sorpresa de esta fase eliminatoria ocurrió: Sarabia perdió el primer intento español, el guardameta Bounou atajó el segundo, de Soler, y también el tercero, de Busquets.

Del lado africano, Sabiri, Ziyech y Hakimi no desperdiciaron sus chances y pusieron a su país en los cuartos de final de la Copa del Mundo por primera vez en la historia.

España quedó desolada, totalmente sorprendida ante la eliminación.

Luis Enrique, activo en sus redes durante el torneo, publicó un pedido de disculpas a su afición "sentimos no haberos dado una alegría".

El oponente, a su vez, sentía haberse ganado la competición. Después de determinada la clasificación, los jugadores de Marruecos celebraron a Bounou y al entrenador haciéndolos "volar".

Como ya es costumbre, muchos integrantes del equipo, emocionados, se arrodillaron y agradecieron a Dios por su victoria.

Hakimi corrió hacia su familia y besó a su hijo, feliz con el logro.

La barra marroquí, una de las más animadas en Qatar, festejó intensamente con su selección. Sobresalió, sin embargo, un grupo en específico, los palestinos.

Desde el inicio del Mundial, banderas de Palestina fueron vistas en los estadios, especialmente en los partidos de Tunísia y Marruecos. Con la victoria de hoy, ellos hicieron una fiesta.

En Gaza, miles de palestinos se reunieron para alentar al conjunto africano.

Los futbolistas, conscientes del apoyo, hicieron también su manifestación:

El sueño mundialista de Marruecos sigue vivo, mientras este sigue eliminando a los favoritos europeos. El próximo obstáculo en ese camino es Portugal, equipo que hoy goleó a Suiza por 6 a 1.

Portugal hizo su mejor partido este martes (6) en el Lusail Stadium con un cambio importante en los 11 iniciales: Cristiano Ronaldo fue suplente, y no entró hasta el minuto 73.

La sorpresa fue Gonçalo Ramos, jugador del Benfica, que ocupó su lugar con mucho mérito. El benfiquista hizo el primer gol a los 17 minutos, abriendo el marcador para los portugueses.

A pesar de haber sido dejado en la banca, Cr7 celebró el gol entusiasmado.

Después de eso, Portugal se adueñó de la partida. Pepe, el histórico defensa, se encargó del 2 a 0 para cerrar el primer tiempo y, en la segunda mitad, el conjunto de Fernando Santos anotó otros 4.

En pocos minutos, Gonçalo Ramos hizo el 3 a 0 y dio la asistencia a Raphaël Guerreiro, quien marcó el cuarto de los portugueses.

Con Manuel Akanji, el defensa del Manchester City, Suiza aprovechó un fallo de la defensa rival para anotar su gol de honor.

Casi al final del juego, Ramos hizo historia en este Mundial. El joven delantero marcó el primer hat-trick de esta edición del torneo después de un pase de João Félix.

5 minutos más tarde, el nuevo fenómeno de Portugal fue sustituido por Cristiano Ronaldo, quien tuvo un gol anulado.

El sexto y último gol de la selección portuguesa lo marcó Rafael Leão en el minuto 90+2.

Con este resultado, Portugal llega a los cuartos de final por tercera vez en su historia, la última vez había sido en 2006. El partido contra Marruecos será el próximo sábado, 10 de diciembre.

En los dos días que siguen no habrá partidos del Mundial. La próxima fecha mundialista es el viernes (9), cuando Argentina se enfrentará a Holanda y Brasil a Croacia para definir los primeros semifinalistas en Qatar.