“Madres al Rescate” no toleramos la discriminación venga de donde venga.

@Cecy López507/En esta sección hablamos de todo, porque las madres nos involucramos en todo y donde vemos injusticias, estereotipos y discriminación alzamos nuestra voz en defensa de los derechos de aquellos que son marginados y calificados como el tipo de personas que no encajan en una sociedad que impone barreras y límites.

“Madres al Rescate” habla hoy a nuestra sociedad que pone esas barreras inútiles a las personas indígenas, las personas que tienen bajos recursos económicos, a las que están expuestas al maltrato, marginación y rechazo por su apariencia física, en relación a su color de piel u origen étnico.

Hemos sido testigos de una sociedad que aparta, rechaza y critica duramente a las personas que no encajan en lo que ellos llaman círculo social, es más generaciones pasan y otras llegan sin cambiar ese pensamiento minúsculo que nos lleva a decaer como raza humana. Y es que no solo los pueblos indígenas han tenido que padecer pobreza, abusos y un trato desigual injustificado sino también la restricción del goce de sus derechos, reflejado por ejemplo al negarles salud y educación, como también en las prácticas sociales al negarles contratación y empleo.

Y qué decir de aquellos que con discapacidad son vistos como raros, extraños y sin asco los excluimos en todos los sentidos, en educación niños con algún tipo de trastorno de atención somos los primeros en apartarlos de niños que supuestamente encajan en lo que definimos como normal. Hasta en los parques infantiles y centros de recreación los niños normales no pueden jugar con aquellos que presentan algún tipo de limitantes.

¿Quién falla en este caso? El sistema o nosotros como padres. A mi parecer ambos son culpables de transmitir la selección y plantear el aislamiento, que al final de cuentas es la ineficiencia de calidad humana que encasilla y aparta lo que no agrada a la vista o lo que a su parecer no está a su nivel para ser tratado o acogido en un entorno donde los estereotipos están a flor de piel.

La discriminación racial étnica o por apariencia física, al igual que cualquier otro tipo de discriminación, profundiza las desigualdades entre los ciudadanos. Las relaciones entre quienes gozan de privilegios y quienes no, es constante y permanente logrando una sociedad en donde no existe cooperación y respeto a la dignidad de todas las personas por igual.

Las consecuencias de mantener una sociedad discriminatoria son tan graves que en un país como el nuestro nunca podrá contar con los índices de desarrollo humano suficientes para que cada ciudadano pueda lograr sus planes de vida, esto más depende ya de la sociedad civil y de sus gobernantes para que estas prácticas que impiden que ese reconocimiento igualitario y el respeto de las personas y sus derechos sean en término generales de igualdad.

Este articulo más que un escrito, busca crear conciencia en usted que me está leyendo y si es madre medite, autoanalícese y ponga en acción si necesita corregir la manera de educar a sus hijos ante estas barreras que no unen a una sociedad, al contrario separa y divide.