Kathy no se siente feliz por no estar sentenciada
Kathy le cuenta a Carolina que durante todas las semanas que estuvo sentenciada, tuvo que relajarse e intentar que eso no le hiciera daño porque era difícil vivir en una casa donde todos estaban en su contra. Ella ve el no estar sentenciada como una oportunidad para volver a ser la Kathy alegre que Carolina le dice que era al principio. Para ella todas las semanas son diferentes y en cada una se aprende algo nuevo.