Trabajadoras sexuales: No somos ‘juguete’, pedimos ‘respeto’
Las trabajadoras sexuales en Panamá claman por “respeto” a sus derechos, mientras denuncian ser “avasalladas” por las unidades de la Policía Nacional (PN).
Gladys Murillo, dirigente de las trabajadoras sexuales manifestó sentirse cansada de que “nos agarren de juguete”, ya que cuando se da la detención de una compañera, tienen que pagar una multa y muchas veces quienes se quedan con el dinero son los policías.
Esta situación, ha llevado a estas mujeres a realizar por tercer año consecutivo una marcha pactada para el próximo 2 de junio en el marco del “Día Internacional de las Trabajadoras Sexuales”, donde esperan poder reunirse con el director de la PN.
“Hay una violación de los derechos humanos de parte de la Policía y el Estado es cómplice de eso porque no se discuten políticas sobre derechos humanos para las trabajadoras sexuales”, apuntó Murillo.
Esta mujer quien representa a las más de 5 mil trabajadoras sexuales reconocidas en Panamá, relató que detrás de cada una de ellas, hay una familia.
Las trabajadoras sexuales tenemos familia, padres e incluso esposos. No te invito a que te guste mi trabajo, sino a que respetes mis derechos humanos como trabajadora.”- Gladys Murillo, dirigente de las trabajadoras sexuales en Panamá-
Murillo aseguró que el trabajo que realizan tiene riesgos como cualquier otro y negó que sean las responsables del aumento de las cifras del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) o del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA).
“Nosotros pedimos que se respeten a las trabajadoras sexuales, andan diciendo que nosotras regamos el SIDA y el VIH, deberían verse primero las estadísticas para que salgan a decir que nosotros lo propagamos”, expresó.
Murillo afirmó que están “por debajo del 1.4% de VIH”; mientras que el “95% de sus compañeras, han sido transmitidas por sus parejas, ni siquiera por un cliente. Ellas se cuidan porque una enfermedad resta”.
