Sustentación de extradición, clave para que Martinelli regrese a Panamá
El expresidente de la República y diputado del Parlamento Centroamericano (Parlacen), Ricardo Martinelli, quien reside en los Estados Unidos, enfrenta en Panamá una serie de investigaciones judiciales por supuestas violaciones en perjuicio de reconocidas figuras panameñas y el erario público.
Es por ello, que este domingo 5 de junio, los asistentes en el programa Radar, analizaron el futuro del exmandatario y la solicitud de extradición.
Según Ana Matilde Gómez, diputada independiente y exprocuradora de la Nación, el tratado de extradición entre Panamá y los Estados Unidos, para que el exmandatario Martinelli enfrente la justicia panameña, “es totalmente posible jurídicamente, desde que entró en vigencia el tratado el 8 de abril de 1905”.
Este no es un tema sencillo, porque hay que justificar la extradición (…). Es un proceso que aunque se maneja por la vía diplomática, tiene un componente judicial para poder hacer la verificación de la viabilidad jurídica del procedimiento”. -Ana Matilde Gómez.-
Según detalló la exprocuradora de Panamá, “lo primero que se debe hacer es la traducción del documento, lo cual no es sencillo, porque implica no solo justificar al país requerido la conducta penal del sujeto, sino también las referencia de los hechos, el derecho aplicable, las normas de prescripción y todo eso tienen que ir acompañado de pruebas y evidentemente por el tiempo transcurrido, al magistrado de Garantía, Jerónimo Mejía, le ha tomado tiempo”.
Este trámite deberá en primera instancia llegar a la embajada de Panamá en Los Estados Unidos, posteriormente pasa al departamento de Estado, para luego ir al departamento de Justicia, donde la valoración de la solicitud pondrá en evidencia el trabajo realizado por el magistrado fiscal.
“Martinelli enfrenta cuatro delitos que se le imputan: Interceptación de telecomunicaciones sin autorización judicial, el delito de vigilancia, seguimiento y grabaciones sin autorización, malversación o peculado por destino y peculado de uso. Los Estados Unidos podría extraditar a Martinelli por cualquiera de estos delitos”, explicó Gómez.
A juicio del excanciller de la República, Samuel Lewis Navarro, la realidad es que Martinelli no solo enfrenta cuatro casos, sino un sin número de casos que implican al exmandatario y a su equipo cercano en delitos flagrantes, por lo que la sustentación de los casos será vital.
Certeza del castigo
Para Luis Navas, profesor de la escuela de Relaciones Internacionales e historiador, “Panamá no es cualquier país, sino una cintura estratégica”. “Aquí lo que vale no es valerse de la figura, sino que sí se cometió un delito, debe haber certeza del castigo”.
Navas considera que la Cancillería de Panamá juega un papel muy importante en la solicitud de extradición, ya que “no se trata de hacer la gestión de extradición por salir del paso, se trata de apoyarnos en el intelecto y la experiencia de quienes pueden contribuir para que no exista impunidad, porque está en juego la gestión judicial del Estado panameño”.
Aurelio Barría, dirigente de la Cruzada Civilista y empresario, señaló: “Siento que hay un detalle fundamental y es que hubo violación de derechos humanos de los panameños y muchos sienten que esto no va a aquedar en nada y no tendrá resultado. Lo que queremos es que el expresidente venga a Panamá, enfrente la justicia y se defienda de los casos donde se les menciona”.
Para Lewis Navarro, las relaciones son entre Estados, y al final lo que impera entre Panamá y Estados Unidos, son las relaciones estratégicas y en este caso particular, en la medida en que Panamá fundamente la solicitud, no cabe duda que Los Estados Unidos responderá.
Por su parte, la exprocuradora concluyó en que, este es un caso judicial, político y mediático, por sus implicaciones y los delitos tan graves que tiene, siendo las interceptaciones telefónicas, lo que sienta un precedente nefasto en la vida republicana.