OMS certifica a Cuba como primer país en eliminar tranmisión materno infantil del VIH
El anuncio fue hecho por la Organización Mundial de la Salud (OMS)
La Organización Mundial de la Salud (OMS) certificó este martes a Cuba como el primer país en eliminar la transmisión de madre a hijo de la sífilis y el VIH, destacando el papel del sistema de atención de salud primaria en la isla.
"El éxito de Cuba demuestra que el acceso universal y la cobertura universal de salud son factibles y de hecho son la clave del éxito, incluso en contra de desafíos tan complejos como el VIH", dijo Carissa Etienne, directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), filial regional de la OMS, en una conferencia de prensa.
En 2013, sólo dos bebés nacieron con VIH en Cuba, y sólo tres nacieron con sífilis congénita, por debajo de los umbrales de eliminación fijados por la OMS.
Para el ministro de Salud Pública de Cuba, Roberto Morales Ojeda, la validación de la OMS "constituye un alto reconocimiento al sistema nacional de salud cubano" que es, apuntó, "accesible, gratuito y universal".
El logro de Cuba enfatiza la necesidad de que los sistemas de salud en América Latina y el Caribe se fundamenten en la atención primaria, señaló Etienne. "Ahí uno puede enfrentar desastres naturales, enfermedades infecciosas o cualquier otra cosa", afirmó.
Según la OMS, otros seis países y territorios de América están en condiciones de solicitar a la OMS la validación de la doble eliminación de estas enfermedades: Anguila, Barbados, Canadá, Estados Unidos, Montserrat y Puerto Rico.
Además ocho países en la región habrían eliminado solo la transmisión de madre a hijo del VIH y 14 habrían eliminado solo la transmisión de la sífilis congénita, indicó la organización en un comunicado.
Según la OMS, cada año, alrededor de 1,4 millones de mujeres viviendo con VIH quedan embarazadas en el mundo, y si no reciben tratamiento existe hasta 45% de posibilidades de transmitir el virus a sus hijos.
Pero desde 2009, el número de niños que nacen cada año con VIH se ha reducido a casi la mitad, al pasar de 400.000 a 240.000 en 2013.
Por otra parte, casi un millón de embarazadas en todo el mundo se infectan con sífilis anualmente, lo que puede resultar en muerte o en infecciones neonatales graves.