Enfrentamientos entre trabajadores por disputa de las fincas bananeras de Barú
Heridos con machetes, golpes y objetos fijos, fue el resultado del enfrentamiento que mantuvieron por algunos minutos los ex trabajadores bananeros de la Asociación para la Transformación Agraria de Barú (ASTBARU) en las fincas bananeras.
Estos ex trabajadores, que tienen la tenencia de unos 777 títulos colectivos de tierras bananeras, están divididos por la figura que utilizaran para hacer reflotar la empresa, dedicada a la producción y exportación de plátanos en Barú.
Los enfrentamientos se dieron cuando uno de los grupos que apoyan al empresario que antes estaba al frente de la empresa, intentó cortar y sacar plátanos de las plantaciones sin la autorización de la junta directiva que fue avalada mediante una Asamblea General de Socios.
Edilsa Stalin, vocera de los ex trabajadores, aseguró que de forma brutal y repentina, los obreros que apoyan al empresario, se abalanzaron contra uno de los socios, le golpearon y cortaron con un machete, lo que causó que otros obreros se trasladaran al lugar para impedir que continuara la agresión.
Nosotros no estamos de acuerdo con que este señor, que administró por más de tres años esta empresa a sus anchas, que nos dejó en la quiebra, que nos abandonó y que nos pide ahora una deuda de cuatro millones de balboas, sin enseñarnos los libros contables, quiera nuevamente a utilizarnos para sus negocios y ganancias", aseguró Rogelio Montero, uno de los trabajadores.
Alcides Castillo, trabajador que apoya al empresario dijo que se debe pensar en no dejar perder las plantaciones, porque ellos no tienen recursos y que esta nueva administración les ha prometido donarles algunos recursos para hacer reflotar la asociación agraria.
“Él nos ha dicho que quiere enmendar los errores del pasado y poner a funcionar la producción y exportación de plátanos, además de ayudarnos en las deudas de cuatro millones y las acciones judiciales de secuestro”, aseguró Castillo.
Los obreros afirman que las autoridades al más alto nivel, iniciando con el gobernador Hugo Méndez y el alcalde de Barú, Franklin Valdés, deben llegar al sector y mediar para buscar una solución a la crisis, antes de que esto degenere en un nuevo enfrentamiento que deje muertos y heridos.