Cambio climático azota a la industria láctea; piden que se aumente el precio por litro de leche

Los productores de leche de la provincia de Chiriquí dijeron que ya están sintiendo los efectos del calentamiento global, lo que evidentemente está incidiendo en sus fincas, pero también en los niveles de producción para abastecer al país y mantener los precios competitivos.

Frente a este panorama, es necesario que se establezcan políticas de Estado, no solamente para salvaguardar la seguridad alimentaria de este rubro, sino también desarrollar programas para que los productores mejoren su tecnificación.

Según los productores de leche, es imperante que la industria vaya pensando en un aumento en los niveles de pago por litro de leche que hacen en el campo, ya que esto podría permitir que se puedan hacer mayores inversiones en mejorar los procesos técnicos y de calidad en sus fincas.

"Cada día los costos de producción son más altos y el costo al consumidor no baja y debe haber un ajuste", señaló Nicasio Saldaña, productor de leche de Renacimiento.

En tanto, Margarita Toro, empresaria de la industria lechera, señaló que actualmente hay escasez de leche en Panamá debido a que no hay suficiente volumen ocasionado por la prolongación de la temporada seca y los efectos del cambio climático.

La industria lechera ha informado que esperan que los productores incrementen sus niveles de producción, para poder abaratar los costos y este ahorro llegue también a los consumidores.

Para ello, la industria Lechera ha iniciado algunas iniciativas relacionadas con la mejora en la calidad del agua, la eficiencia en la producción y la alimentación adecuada de sus hatos ganaderos, con el propósito de ahorrar costos y ser más eficientes.

La producción anual de leche en el país es de aproximadamente 180 millones de litros y la demanda es de 480 millones de litros de leche anuales entre leche fluida, diversos productos lácteos nacionales y productos lácteos importados. El consumo per cápita es de 120 litros. La importación de leche en polvo es de unas 1980 toneladas métricas al año.

La leche se clasifica según su calidad en los grados A, B y C. El grado A corresponde a la máxima calidad, mientras que el grado C es el de menor calidad bacteriológica y composicional.