Procuradora: no hay asidero legal para que la Asamblea entregue donativos y subsidios
La procuradora Kenia Porcell consideró que la decisión de la Contraloría de emitir “requisitos y controles para posibilitar la entrega de donativos y subsidios” desde la Asamblea Nacional “no tiene asidero jurídico”.
Según la fiscal general, la Contraloría no podía hacer eso porque el artículo 280 de la Constitución –que regula sus funciones- establece que ésta puede fiscalizar y regular un futuro acto de manejo de fondos siempre “que éste se pueda realizar con un fundamento jurídico positivo”.
¿Qué quiere decir? Porcell responde automáticamente: “que sea permitido como una atribución del ente para el cual está destinado”. Y la Asamblea no está facultada para dar subsidios.
La procuradora lo deja claro en otra parte de su postura. “La aprobación (del manual) es conforme a una facultad legal que le confiere la Ley 32 de 1984, Orgánica de la Contraloría General de la República, pero justificada cuando se trata de actos de manejo de una entidad destinada para tal fin, en base a las facultades constitucionales y legales consignadas, tal actividad, que no es el caso de la Asamblea Nacional de Diputados, a quien la Constitución Política de nuestro país no faculta para ello”.
Su postura está consignada en una vista que remitió a la Corte Suprema de Justicia (CS), en la que recomendó declarar inconstitucional un manual que adopta el Decreto 441-2016-DMySC del 25 de octubre pasado, con el que la Contraloría pretendía dar luz verde al festín de donativos legislativos.
La demanda la interpuso el abogado Ernesto Cedeño, quien argumentó en su escrito que en lugar de “impedir que los diputados practiquen el clientelismo, la Contraloría legaliza un procedimiento populista, carente de asidero constitucional”.
A su juicio, con esa norma “todos los diputados tienen la posibilidad de apoyar a las personas como antes se hacía con las llamadas partidas circuitales. Se les lleva el pedido al Presidente de la Asamblea y si él da el visto bueno, se le puede dar subsidio o donativo hasta un tope, pero este tope se puede repetir hasta tres veces en un período fiscal de un año”.
Ya antes los diputados se inhibieron el año pasado de recibir partidas públicas para entregar donaciones navideñas, tras las presiones de la sociedad.