Philip Seymour Hoffman dejó la mayor parte de su herencia a su pareja
El oscarizado actor Philip Seymour Hoffman, que murió repentinamente a principios del mes pasado por una supuesta sobredosis de drogas, dejó el grueso de su herencia a su pareja Marianne O'Donnell, según un testamento presentado en el tribunal de Nueva York. Hoffman, de 46 años, ganó el Oscar al mejor actor por su papel en la película biográfica de 2005 "Capote", estaba considerado uno de los mejores actores de su generación en la pantalla y sobre el escenario. O'Donnell, conocida como Mimi, es la madre de los tres niños de la pareja: Cooper, Tallulah y Willa. También fue nombrada albacea de la herencia, cuyo valor exacto de Hoffman no se conoce. En el testamento, con fecha de octubre de 2004, el actor también creó un fondo fiduciario para su entonces único hijo, Cooper, y pidió que fuese criado en Nueva York, Chicago o San Francisco. Si eso no era posible, Hoffman pidió que su hijo visitase las ciudades estadounidenses al menos dos veces al año. "El propósito de esta petición es que mi hijo esté expuesto a la cultura, el arte y la arquitectura que estas ciudades ofrecen", decía el testamento. Aunque Hoffman fue encontrado en su apartamento del Greenwich Village con una jeringuilla en su brazo, la causa de su muerte sigue sin determinar a la espera de los resultados de más pruebas. Hoffman apareció en películas independientes poco convencionales y en éxitos de taquilla como la saga de "Los juegos del hambre". Fue candidato a los Oscar como mejor actor secundario por "The master", "La duda" y "La guerra de Charlie Wilson". Sobre el escenario, fue nominado a los premios Tony por su papel de Willy Loman en la obra del ganador del premio Pulitzer Arthur Miller, "Muerte de un viajante".