Advierten que participantes de la vacunación clandestina no deben ser considerados 'víctimas'
El exfiscal Giovanni Olmos explicó que la investigación en el caso de la vacunación clandestina se encuentra en primera fase, donde se deben manejar diferentes teorías del caso, ya que hay posibles situaciones donde se violarían varios artículos del Código Penal.
Olmos señaló que en esta fase de la investigación es importante que el fiscal y la autoridad del Ministerio Público actúe con mucha cautela, por lo que en su opinión, él no se hubiera reunido con una persona que pudiera tener algún grado de vinculación, aunque el abogado haya solicitado una cita para señalar algo que contribuya con la investigación.
También explicó que, por tratarse de Sociedades Anónimas, no solo se investiga a personas naturales, sino también a personas jurídicas, o sea, que obviamente la persona que es representante legal de la sociedad también podría tener un grado de vinculación en los hechos.
El exfiscal dijo que se trata de una etapa muy incipiente, donde se trabaja con indicios, la fiscalía tiene un catálogo de conductas que primero tiene que señalar cuáles son y luego por el principio de adecuación típica llevarlo a la norma penal, por lo que también se podría estar frente a la figura de delitos contra la salud pública.
“Es necesario que se reciba informe pericial oportuno y diligente para obtener información de los médicos y laboratorios que acrediten que, no solo dos personas sino todas las personas, que acrediten si fueron vacunados con Pfizer, AstraZeneca o cualquier otra sustancia”, indicó.
Olmos resaltó que lo que le preocupa es que si se vacunó con Pfizer, “hay una distorsión perversa, estaríamos hablando de delitos contra la administración pública, peculado que es más grave. Ya eso crea una situación de alarma a todos los que no nos hemos vacunando, a todos los que estamos esperando nuestro turno para ser vacunados y que aparezca ahora un lugar clandestino VIP y las personas se están vacunando”.
Recordó que existen otras conductas que deben ser analizadas por el Ministerio Público, como la supuesta irregularidad en la entrega de vacunas en Chiriquí y la vacunación de una persona ya fallecida.
“Eso lleva a una situación muy gravosa, yo espero por la salud mental y psicológica de todos los panameños que aquí no se esté hablando de distorsiones en la entrega de vacunas porque eso sí sería grave”, puntualizó Olmos.
Consideró que las personas que adquirieron la vacuna pagando los 200.00 dólares no son víctimas, ya que este proceso de vacunación tiene un ritual ordenado por el Ministerio de Salud que todos sabemos, y no descartó que se vincule también a las personas que forman parte de las empresas y que tienen conocimiento de esos hechos porque puede haber algún grado de participación.
“Yo no los considero víctimas, hay una situación de tráfico y otras situaciones provenientes de un delito, claro ellos tendrían que demostrar que fueron engañados. Pero en esta fase de la investigación yo lo vería de otra forma”, manifestó.
Destacó que el Ministerio Público debe actuar con escepticismo y cuidado para darse cuenta si esto es cuartada, porque tienen que tener conocimiento de cómo manejar una cuartada, si lo es o no.