Panamá pierde cerca de $30 millones por día con huelga del Suntracs

El presidente de la Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresa (Apede), Héctor Cotes, manifestó que es importante que todas las negociaciones se hagan en la mesa de diálogo.

Por otra parte instó a que si se van a realizar actividades de cierre de calles o protestas, tener presente que se afecta el libre tránsito de terceros y en ese sentido es importante velar porque los otros componentes de la economía sigan andando.

Detalló que en cuanto al Producto Interno Bruto (PIB), Panamá pierde cerca de 30 millones de dólares por día, es decir que si la huelga lleva seis días, serían cerca de 180 millones de dólares, aparte del atraso de las obras y los compromisos financieros con los que se debe cumplir.

Cotes ha reiterado que el panorama del país para cuando se negoció la última convención colectiva era diferente y se desarrollaban proyectos de construcción de manera importante, pero no es la actual realidad, por lo que los números que se están viendo en la propuesta del Suntracs, son impensables.

Sostiene que la economía en Panamá está creciendo pero no en el sector de la construcción, por lo que hace un llamado a que no se afecte al resto de las personas “que tratan de llevar el pan a sus casas”.

Actualmente un principiante en el sector de la construcción gana 850 dólares, si se le agrega el 50% se estaría hablando de mil 200 dólares al mes, lo que no es sostenible para la industria.

Cotes instó al Ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral (Mitradel) para que se mantenga como árbitro imparcial dentro de las negociaciones.

El empresario también se ha referido al “camarón legislativo” que fue aprobado en la Asamblea Nacional, el pasado jueves 19 de abril.

Asegura que el caso debe dejar la reflexión de lo que se tiene que hacer para que no siga pasando y que pueda haber un proceso interno en el que todos los diputados puedan revisar lo que se está aprobando.

Se trata de la derogación de un contrato suscrito en 2015 entre el Estado panameño y una empresa portuaria para la construcción y operación de una terminal de contenedores en Rodman.

La revocatoria fue añadida en un artículo del proyecto de Ley 53, sobre la apertura de empresas y la regulación de venta de licor en zonas residenciales.