Obstetras y ginecólogos: Proyecto de bebés no nacidos incitaría al aumento de abortos inseguros
La Sociedad Panameña de Obstetricia y Ginecología (SPOG), pronunció su oposición al proyecto de ley No 18, de identidad para los bebés fallecidos en el vientre materno, que ayer jueves, 21 de febrero, fue aprobado en primer debate por la Comisión de la Mujer, Niñez, Juventud y Familia.
Los profesionales de la salud consideran que la iniciativa propuesta por la diputada, Corina Cano, pudiera incitar al aumento de la realización de abortos inseguros, fuera de las instalaciones sanitarias y con la debida supervisión profesional, lo que sin duda pone en riesgo la vida de las madres.
Además, pudiera representar la posibilidad de pena para aquellos profesionales de la salud que deban atender a las mujeres en estas condiciones.
También, consideran que el proyecto de ley No 18 viola los derechos a la vida y salud de la mujer, contemplados en la Constitución Nacional y Código Civil de la República de Panamá; así como en la Convención Internacional de los Derechos Humanos; considerando –además que estos establecen que se entiende por niño todo ser humano desde su nacimiento hasta los 18 años de edad. Dejando de lado sus posibles efectos sobre el ordenamiento jurídico y el Código Civil.
El gremio médico recordó que la normativa actual establecida en la Ley de Registro Civil, obliga al personal sanitario a registrar todos nacimientos y defunciones fetales, llámese aborto, ectópico o muerte perinatal, esta última incluye muerte fetal tardía (intrautero) y neonatal temprana.
Muy diferente es la llamada certificación, que tiene connotaciones legales y en la que, como su palabra lo indica, se certifica un acto que después tendrá repercusiones o acciones, como adquirir derechos y deberes.
“Consideramos que el proyecto podría crear duplicidad de datos o subregistros que reflejen un escenario irreal, toda vez que desde 2002 existe un registro de nacimientos vivos y defunciones fetales, en las instalaciones de salud pública (Minsa y CSS) y privada en todo el territorio nacional, que es considerado por el Instituto Nacional de Estadística y Censo (INEC) de la Contraloría General de la República y publicado en sus informes periódicos; y que es utilizado por diversas instituciones y organismos como base para la creación de planes de acción y políticas públicas”, cita una nota de prensa del gremio médico.
Ante lo cual, recomiendan que, en vez de impulsar la iniciativa, se redirijan los esfuerzos a mejorar la partida presupuestaria para la prevención y disminución de las muertes maternas y fetales; apoyar y ejecutar las normas existentes que hoy garantizan la atención segura de las mujeres durante su embarazo, el parto y el postparto.
Agregan que se trabaje en nuevas iniciativas en materia de salud materno infantil, sin distingo de credo.