Unos 28,000 niños cruzaron la frontera a través de la selva de Darién en el 2021
Crisis migratoria
Durante el 2021, más de 126 mil migrantes cruzaron la frontera entre Colombia y Panamá a través de la selva de Darién, siendo una cifra récord histórica, puesto que, igual cantidad de migrantes cruzaron la frontera en los últimos 11 años, lo que significa un crecimiento exponencial y se espera que para este 2022 la realidad no sea diferente.
Así lo ha dicho el presidente de la Junta Directiva de las Aldeas Infantiles S.O.S, Domingo Barrios, quien señala que la mayoría de estas personas proviene de Haití, Cuba, Suramérica, África y Asia. Pero existe un número importante de menores que atraviesan la frontera separados de su familia.
“Hace cuatro años solamente 2% eran menores que migraban por esta frontera, el año pasado 22% eran menores de edad, más de 28 mil niños, de estos cientos de ellos llegan a Panamá separados de su familia porque la pierden en el trayecto, porque los mandan adelante, porque sus padres fallecen o son víctimas de atracos o violaciones, o son niños enviados no acompañados”, detalló.
Barrios explicó que anteriormente, cuando no existía la casa transitoria, los niños llegaban al centro de recepción de migración y de allí eran enviados a la Policía de Asuntos de Adolescencia y Menores que no era la mejor alternativa de cuido, ya que lo ideal es que sean enviados a un modelo de atención lo más familiar posible para que experimenten menos traumas.
Actualmente, los niños migrantes llegan a los centros de migración donde son identificados por el Servicio Nacional de Fronteras y son referidos a la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (Senniaf) que los envía a la casa transitoria de Aldeas Infantiles S.O.S donde pasan de 3 a 4 días y se inicia el proceso de reunificación con su familia que en algunos casos llegan después.
En caso de que no se pueda hacer la reunificación, se hacen las gestiones internacionales para localizar la familia de origen, si no se contacta entonces son enviados a cualquiera de los albergues de S.O.S donde se continúa con esa búsqueda del familiar.
“Tener la casita de acompañamiento en Metetí permite que se dé la reintegración familiar, porque el familiar viene detrás. Si el niño es enviado a un albergue de Panamá o Chiriquí se dificulta la reintegración porque muchas veces los niños se quedan en el país y los padres continúan porque no logran ubicarlo, por lo que es importante que el reintegro se dé allí en Metetí”, manifestó Barrio.
Ante los pronósticos para este 2022, en que se espera una oleada que vaya en incremento, se está ejecutando un programa de familias de acogimiento, donde se ha convocado a las familias en Darién a que acojan a un niño mientras se dan los procesos de reintegración. Estas familias han sido evaluadas en aspectos sociales, psicológicos, de capacidad económica y espacios en el hogar para ser consideradas para el programa y luego serán certificadas por la Senniaf.
Hasta el momento se han superado las expectativas de la cantidad de familias que se integrarían al programa.