Problemas del Fondo Solidario de Vivienda: 'sin presupuesto ni ley'
Miviot
El Fondo Solidario implica un bono o subsidio de $10,000 que se otorga a través del Miviot a las personas que desean adquirir su primera vivienda, cuyo precio de venta no exceda los $70,000.
Panamá/El Fondo Solidario de Vivienda, que maneja el Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial (Miviot), está en problemas. El programa, que consiste en un subsidio de $10,000 otorgado a través del Miviot para quienes deseen adquirir su primera vivienda, cuyo precio de venta no exceda los $70,000, no cuenta con presupuesto ni ley para extenderse. Sin embargo, la entidad está revisando opciones para mantenerlo vigente.
Jaime Jované, ministro de esa cartera, dejó claro que aún se adeudan aproximadamente $60 millones a las promotoras como parte del programa. Esta deuda corresponde a las promotoras que participan en la construcción de dichas viviendas.
“Actualmente no hay ni presupuesto ni ley para amparar el bono de $10,000 en aquellas viviendas que no fueron construidas hasta el 30 de junio de 2024 [fecha en que venció el decreto del programa]. Sin embargo, el Estado honrará el pago de las que se edificaron hasta esa fecha”, anunció Jované a los diputados durante una sustentación de traslado de partida en la Comisión de Presupuesto de la Asamblea.
Jované explicó que, para mantener el Fondo Solidario de Vivienda, que culminó su vigencia el pasado 30 de junio de 2024 tras cinco años de extensión, se están estudiando al menos tres alternativas posibles. “Hemos hecho muchos ejercicios y conversado con diferentes gremios y contratistas porque hay que revisar este decreto para que realmente llegue a donde tiene que llegar y que existan los fondos para cubrirlo. Cuando haya escasez, el Estado debe decidir dónde se generan mejores efectos”, planteó.
De acuerdo con el ministro, entre las opciones está transferir el monto solidario de las unidades de vivienda (que se construyan después del 30 de junio ) a un tramo de interés preferencial, con tasas especiales, para aliviar al Estado de un desembolso único e instantáneo. “Es muy difícil presupuestar”, dijo.
Otra alternativa sería hacerlo por ponderación, evaluando el desarrollo habitacional en términos de dimensiones e infraestructuras correctas, agua, educación, vialidad, entre otros, y distribuyendo los $10,000 en montos de $2,500, $5,500, $7,500 y $10,000 según el cumplimiento de estas normas.
Una tercera opción buscaría impulsar la densificación para contener el crecimiento horizontal, que representa una carga adicional para el Estado en términos de servicios públicos.
En abril pasado, representantes de empresas revelaron que el Gobierno Nacional les adeudaba más de $100 millones correspondientes al programa. Estos reclamos fueron una constante durante la administración pasada debido a los pagos atrasados a las promotoras afiliadas.
A pesar de buscar soluciones, el ministro aclaró que esto no significa un abandono de los compromisos pendientes con las promotoras, debido a que el gobierno saliente dejó transferencias para cubrir las deudas del programa, y ya se han realizado desembolsos de $19 millones y $29 millones, respectivamente, para atender las responsabilidades atrasadas de 2021, 2022, 2023 y los primeros meses de 2024.
Para el año 2025, el Miviot solicitó al Ministerio de Economía y Finanzas $354.8 millones de presupuesto, de los cuales $338.8 millones serían para inversión y $16 millones para funcionamiento.