Tras 26 años de la "Masacre de Albrook", la lucha por su recuerdo continúa

Hace 26 años, un día como hoy, 11 militares fueron asesinados bajo el régimen de la dictadura del exgeneral de las entonces Fuerzas de Defensa de Panamá, Manuel Antonio Noriega.

“La masacre de Albrook”, como se le conoce, cambió la vida de las familias de estos militares, que intentaron derrocar al exhombre fuerte de Panamá.

Por años las familias de los 11 golpistas han exigido el reconocimiento para estos militares, cuya acción cayó en el olvido de la gran mayoría de los panameños, principalmente las futuras generaciones.

La lucha continúa

Para Susana Ortega, hija del subteniente Ismael Ortega, uno de los militares asesinados por órdenes del exdictador panameño, la lucha por el reconocimiento de la “valentía” de estos hombres todavía continúa.

Hoy el gobierno rinde un homenaje de reconocimiento a los caídos y entrega certificados a las viudas y familiares.

Según Ortega, el interés de sus sobrevivientes es que se haga el “reconocimiento que merecen las personas que han luchado por la democracia del país”.

Agregó que ya están trabajando para que en el lugar donde murieron se levante una placa para los caídos el 3 de octubre de 1989.

“Por algunos inconvenientes no se pudo concretar este año, pero se que para el próximo será una realidad”, acotó Ortega.

Cruda historia

El 3 de octubre de 1989, el mayor Moisés Giroldi, apoyado por un grupo de militares que habían regresado a Panamá, después de cumplir una misión de paz en Namibia, intentó darle un golpe de Estado al exgeneral Manuel Antonio Noriega.

El grupo, logró retener a Noriega, sin embargo, a medida que pasaban las horas comenzaron a perder el control de la situación.

Noriega trataba de convencer a Giroldi [que era su compadre] para que lo dejará en libertad.

El exdictador logró el control de la situación y entonces dio rienda suelta a una de las barbaries cometidas bajo su régimen.

Cuenta la historia que estos 11 golpistas fueron ejecutados entre el 3 y el 4 de octubre en un hangar de Albrook y en el cuartel de Tinajitas en San Miguelito.