Los secretos de Panamá La Vieja
La antigua ciudad de Panamá, mejor conocida como "Panamá La Vieja", guarda innumerables secretos rumbo a sus 500 años de fundación.
La primera ciudad fundada por Pedro Arias de Ávila (llamado Pedrarias Dávila) hace 497 años (15 de agosto de 1519), se convirtió en la más antigua de las capitales de tierra firme.
Según relató durante entrevista concedida a TVN-2.com, Julieta Arango, directora ejecutiva del Patronato de Panamá Viejo, los orígenes de Panamá La Vieja, están enmarcados en la pobreza y la sencillez de sus viviendas al ser construidas con madera, porque las piedras eran sumamente costosas.
Panamá Viejo finalmente fue evolucionando hasta poseer los conventos hechos de calicanto (muro realizado con piedras de distintos tamaños sin labrar, colocadas sin orden establecido y unidas con argamasa, mortero, yeso, cal o cemento), casas reales y algunas residencias de comerciantes ricos.
La antigua ciudad de Panamá, no era saludable, contaba con problemas de agua, lo que era una queja constante de sus pobladores. También estaba rodeada de pantanos y ciénagas (lugar de aguas estancadas y fondo de barro), trayendo consigo mosquitos y enfermedades en la comunidad.
Arango, quien lidera desde hace 16 años el Patronato de Panamá Viejo contó a TVN-2.com, que hubo muchos intentos de trasladar la antigua ciudad de Panamá, pero fue casi imposible, porque contaban con comerciantes y se percibía el tránsito de mercancía proveniente de Suramérica y Europa.
Morgan ataca la ciudad
No fue hasta el 28 de enero de 1671, cuando la ciudad fue destruida por el pirata inglés Henry Morgan, quien era hijo de un rico labrador, que dejó su hogar para residir en la isla de Jamaica, donde empezó a asociarse con corsarios de la época.
Arango relató que “Morgan planificó el ataque, las autoridades de Panamá lo sabían. Ataca el fuerte de San Lorenzo, donde enarbolan la bandera inglesa y se trasladan hasta la ciudad de Panamá”.
Documentos recopilan información trascendental sobre este fatídico suceso, donde cientos de personas inocentes perdieron la vida en la búsqueda de poder y riqueza de Morgan, quien se encontraba en compañía de más de 400 hombres.
Según Néstor Sánchez, guía turístico del Patronato de Panamá viejo, se estima que Morgan tomó 9 días de camino desde el Fuerte de San Lorenzo hasta llegar a la ciudad de Panamá.
Alertados por la inminencia del ataque a Panamá, niños, mujeres y monjas, fueron enviados al Perú dentro de navíos.
A pesar que las autoridades panameñas sabían del ataque anticipado y enviaron las solicitudes de apoyo a otras naciones; la falta de tecnología pasó factura, y no fue hasta 4 meses después del ataque que finalmente llegó la ayuda.
Desgraciadamente en ese entonces no había fax, ni internet. Hoy en día atacan en un lugar y cinco minutos después el mundo lo sabe gracias al avance de la comunicación”, señaló la directora del Patronato.
¿Qué pasó después del ataque?
El gobernador de Panamá en Tierra Firme, Juan Pérez de Guzmán, al ver como perdían su ciudad, dio la orden de prenderle fuego para evitar que Morgan se quedara en Panamá hasta convertirla en un centro de ataque.
Después del asalto, las autoridades de la época tomaron la decisión de no reconstruir la ciudad, sino mudar parte de la estructura en 1673 hacia lo que se conoce hoy día como el Casco Antiguo.
Aproximadamente 10 mil personas habitaban la antigua ciudad, siendo el ataque un momento trágico para sus ciudadanos.
“La destrucción de Panamá La Vieja fue una tragedia muy grande no solo para la capital, sino para España que perdió uno de los centros logísticos de ese momento”- Julieta Arango-.
Muchas personas murieron y se acrecentaron las enfermedades, producto de la falta de atención médica y el avance de la medicina para brindar atención de calidad.
Familias muy adineradas que perdieron sus viviendas durante el ataque, tuvieron que mudarse con sus esclavos o empleados en los bohíos que tenían.
Independientemente de lo que económicamente se pudo perder, es que te quedaste sin residencia. Hubo muchas familias de dinero con casas muy lindas que tuvieron que irse a vivir con sus esclavos o empleados en los bohíos y eso fue difícil, luego no era tan fácil levantar toda una ciudad”, acotó Arango.
¿Qué representó la destrucción de la ciudad?
Lo que representó este ataque para el país, va más allá de las pérdidas económicas según Arango, era el temor de perder sus vidas y volver a empezar.
Este suceso demuestra, que el destino de Panamá como sitio de tránsito internacional, comienza desde la época prehispánica con el camino de cruces, luego el camino real, el ferrocarril, el Canal y ahora el Canal ampliado, con lo cual se ha venido forjando ese país dedicado al servicio que hace grande a Panamá.