La Policía Nacional y el uso de fuerza durante las protestas: ¿están cumpliendo con la ley?

En medio de un callejón oscuro y ante varios manifestantes que se oponen a las reformas constitucionales, un agente policial sacó su arma y apuntó a un joven. Esta imagen se volvió viral y puso sobre la mesa una pregunta: ¿Está cumpliendo la Policía Nacional con lo establecido por la ley?

Tras los enfrentamientos se han reportado 52 personas detenidas, entre las que se encuentran 6 menores de edad y 11 extranjeros. Además, se dieron reportes de individuos heridos por perdigones y decenas de personas afectadas por gases lacrimógenos.

Jóvenes estudiantes han mostrado en sus redes sociales las lesiones por perdigones. Juan Linares es uno de ellos. Fue detenido con heridas en la cabeza, la pierna y el brazo, sin embargo no se le brindó atención médica de inmediato y estuvo por más de 4 horas atado con zunchos en la estación policial de Ancón. Incluso cuando finalmente lo trasladaron hasta un centro de salud, lo condujeron amarrado.

El exprecandidato presidencial del Frente Ampio por la Democracia (FAD), Richard Morales, que fue detenido tras las protestas, aseguró que en los centros de detención había hombres y mujeres que se quejaban del dolor por los golpes. Nadie los atendió.

La fuerza pública ante la imagen del policía apuntando a los manifestantes con un arma, salió a desmentirlo en horas de la mañana de este 31 de octubre, pero no aportaron mayores pruebas de que se tratara de otro tipo de arma.

¿Qué regula el uso de la fuerza en la Policía Nacional? ¿Cuáles son las justificaciones para usar gas pimienta, varas policiales o armas de fuego contra la ciudadanía?

La respuesta se encuentra primero en la Ley 18 de 1997, conocida como la Ley Orgánica de la Policía Nacional y en el Manual de Procedimiento Policial.

La ley establece el concepto de "niveles de fuerza no letal", los cuáles se aplican en el siguiente orden: persuasión, reducción física de movimientos, rociadores irritantes y gases lacrimógenos, y finalmente la vara policial. Hasta este punto, no se contempla el uso de armas de fuego.

Se enfatiza que "en todo momento, los derechos humanos de la persona deben respetarse". Detallando que la resistencia pacífica de una persona no justifica la utilización de la vara policial como arma de impacto y que en estos casos "el policía deberá buscar otros medios para controlarla". Además, se instruye que debe evitarse colocar esposas a mujeres embarazadas, ancianos y menores de edad.

El uso de armas de fuego es considerado un recurso extremo, al que el policía solo debe recurrir tras haber agotado previamente todas las otras alternativas. El artículo 36 de la Ley Orgánica señala que cualquier lesión o daño que el policía ocasione a terceros por el uso indiscriminado de disparos de advertencia le acarreará las responsabilidades legales que correspondan.

El artículo 39 establece que "las armas cortas no deben estar fuera de la funda, ni montadas durante la persecución y arresto de un sospechoso, siempre que éste no se encuentre armado. Las armas largas deben estar debidamente aseguradas, hasta que la necesidad de disparar sea evidente".

El Manual de la Policía añade que "los miembros de la Policía Nacional no harán exhibiciones innecesarias de sus armas, evitarán sacarlas de sus fundas sin motivo y deberán manejarlas con cuidado y buen juicio".

"Nos queda cumplir fielmente estos parámetros, hacerlos parte del desempeño profesional de cada unidad, y afirmar siempre que el oficio policial es y debe ser motivo de orgullo y honra para quien lo desempeña, una causa de confianza absoluta para la ciudadanía, y un factor de seguridad incontestable para la Patria Panameña, a la que nos debemos sin condiciones", expresa el manual de la Policía en su edición de 2007, firmado por Rolando Mirones, actual Ministro de Seguridad Pública.

¿Qué dice la Policía Nacional?

La Policía Nacional emitió un comunicado asegurando que cumplió con los procedimientos durante las protestas y que algunos de sus agentes resultaron con heridas leves, producto de las piedras lanzadas por los manifestantes.

“Como institución garante de la seguridad y el orden público, también velamos por los derechos humanos y las libertades individuales, por lo que hacemos un llamado a la ciudadanía a conservar la calma”, destaca la nota de prensa.

En la comunicación oficial no citan el incidente del agente que sacó el arma de fuego.