El recorte de presupuesto afecta al laboratorio de ADN del Imelcf
TVN Noticias recorrió los laboratorios de ADN cuyo presupuesto fue recortado drásticamente para el 2019. En el laboratorio se realizan pruebas forenses claves en las investigaciones de las autoridades.
Los laboratorios de ADN están en óptimas condiciones gracias a las donaciones internacionales. Sin embargo, el mantenimiento que requieren los equipos es impresionante.
“Nos llega gran cantidad de evidencia, que genera gran cantidad de costos. Además está el mantenimiento de equipos que son de última tecnología que requieren mayor inversión en cuanto al mantenimiento, calibración y entrenamiento para los peritos. Contamos con poco personal para realizar la gran cantidad de evidencias que nos llegan a los laboratorios”, manifestó José Humberto Torres, del Laboratorio de ADN del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses (Imelcf).
Las pruebas de ADN son solicitadas por la fiscalía para encontrar fluidos biológicos a través de pruebas físico químicas y serológicas. En un arma se busca ADN de contacto, utilizando hisopos higiénicos para no contaminar la evidencia.
“En las armas de fuego se buscan células epiteliales y residuos de sangre que se hayan salpicado sobre el arma”, explicó Diomedes Trejos, de Extracción de ADN del Imelcf.
El mismo procedimiento se hace en los casquillos y los proyectiles, buscando algún indicio que sirva de evidencia en la investigación.
“En los casquillos de las municiones se hacen los mismo indicios a solicitud de la autoridad”, añadió Trejos.
Hasta una chancleta dejada en la escena del crimen puede ser clave en una investigación.
“Es un aporte más a la investigación de la justicia y es un aporte a un juicio oral”, acotó Trejos.
Cuando se trata de una víctima no identificada, se envían huesos de la clavícula al laboratorio de extracción de ADN. Se utiliza el hueso de la clavícula porque tiene más cartílagos para analizar.
“Se trabajan los tejidos humanos y también fluidos impregnados en diferentes indicios relacionados con escenas de crimen”, detalló José Castillo, biólogo del Imelcf.
Una vez se extraen las muestras de ADN, se procede a realizar la prueba final que será entregada a las autoridades.
“El presupuesto nos afecta grandemente. Las pruebas de ADN son muy caras. Pueden estar costando unos dos mil dólares”, lamentó Torres.
Todos estos procesos serán afectados por la falta de presupuesto en el 2019.
“Las estadísticas reflejan un incremento de ingreso de casos y evidencias para análisis. Si ese incremento no es proporcional a la inversión que se hace para los análisis, va a haber un desequilibrio y no vamos a poder cumplir con los términos que establece el Sistema Penal para la incorporación de estas pruebas en los juicios”, apuntó Castillo.
Una vez culminada la extracción de ADN, la evidencia es guardada en una pequeña oficina donde las cajas ya llegan hasta techo.
“Nos estamos quedando con poco espacio. Salen pocos indicios”, destacó Manuel Murillo, asistente de Laboratorio.
La falta de espacio pone en peligro la conservación de la evidencia analizada.
“Tenemos que salvaguardar o dar las condiciones físicas para que se mantenga la integridad de los indicios de evidencia que llegan”, enfatizó Murillo.
Son trabajos esenciales que determinan la libertad o no de un sindicado, hay evidencias que pueden no ser detectadas por el daño a un equipo que no pudo ser reparado por la falta de un presupuesto, cónsono a las exigencias del sistema de justicia.