En juicio por crimen de jóvenes chorreranos piden absolución de tres involucrados
El segundo día del juicio por el secuestro y asesinato de cinco jóvenes chorreranos de ascendencia asiática ha concluido y continuará este miércoles 28 de junio.
Durante la jornada de este martes, se desarrolló la fase de elementos vinculatorios, donde el fiscal de la causa y los abogados de las familias afectadas, hicieron uso de la palabra.
En el banquillo de los acusados están Alcibíades Méndez, Keyla Gissell Bendibú, quien es pareja sentimental de Méndez y a quien se le encontró un maletín con varios miles de dólares producto del delito que se cometió.
Mientras que Mario Luis Vega, está acusado de homicidio, secuestro y blanqueo de capitales, esposo de una de las hijastras de Méndez. Vivía en la casa donde las autoridades hicieron el primer allanamiento y fue con Alcibíades Méndez a una casa de citas en el distrito de La Chorrera, a buscar parte del dinero que pagaron los padres de uno de los jóvenes que habían sido asesinadas.
A Félix Del Rosario Brujan, no se le ha acreditado la comisión de delito dentro del expediente, pero fue mencionado y por eso se requería su presencia en la diligencia.
En tanto, Inés Magaly Torres Flores, expareja de Méndez, fue contactada por él para que buscara parte del dinero recaudado. Ella habría acudido a un casino a cambiar el dinero y así lavarlo. Delmira Edith Torres, hermana de Magaly, también habría lavado parte del dinero pagado por el rescate, en un casino.
Inés Madeleine Chavarría, hija de Méndez. Roberto Marisca y Kenny Alexander Bendibú, habrían colocado baldosas en la residencia donde fueron sepultados los cadáveres.
Los abogados querellantes han solicitado la absolución de Roberto Marsical, Kenny Alexander Bendibú y de Félix Rosario, porque los dos primeros solo colocaban las baldosas y no sabían lo que había pasado y fueron involucrados en el caso.
Mientras que al señor Rosario, Méndez lo vinculó porque había tenido una discusión con una de sus hijas.
Los delitos por los que se juzga al resto de las personas son por secuestro, homicidio y blanqueo de capitales.
Méndez debería pagar un total de 234 años de cárcel si le suman las condenas por cada uno de los delitos, pero las leyes panameñas estipulan como pena máxima una cantidad de 50 años de cárcel.
Algunos abogados de las familias, dijeron que esperan lograr que se le imponga la condena más grave que permita las leyes panameñas.
Sostuvieron que hay un hecho evidente y claramente determinado, que es la existencia de los delitos: secuestro, homicidio y el lavado de dinero, ya que el señor Méndez se declaró culpable, por lo que la labor de la querella no está en discutir la comisión de ese delito, sino si existe responsabilidad.
El juicio va a continuar este miércoles 28 de junio a partir de las 9:00 a.m. y se escucharán los alegatos de la defensa de los imputados.